La actualización de la estadística al quinto mes del año otorga a Asturias un exceso de mortalidad de 422 fallecimientos si se comparan los meses de más alta incidencia de la pandemia -marzo, abril y mayo- con los del año pasado. La cifra excede los 339 muertos oficiales por coronavirus, aunque es solo de 312 si se confronta con 2018, según Sadei. La diferencia con los nacimientos (crecimiento vegetativo) confirma a este como el año más negro para la demografía asturiana, con 4.123 habitantes menos de enero a mayo.