El primer teniente de alcalde de Avilés, Manuel Campa, pidió ayer prudencia a la población "ante una pandemia vírica que sigue ahí y que obliga a seguir vigilantes, con un trabajo personal que debe desarrollarse día a día". Campa realizó estas declaraciones durante la plantación de un tejo como acto de homenaje a las víctimas del covid-19, convocado por el Gobierno del Principado y celebrado en el recinto del Hospital de Avilés, un centro sanitario que, junto al San Agustín, hizo frente al nuevo coronavirus con unidades especiales destinadas a los infectados. En la plantación del tejo colaboró también el gerente del área sanitaria avilesina, Ricardo de Dios, y el director de la Fundación Hospital Avilés, José Menéndez Guerra, junto a otros miembros de la Corporación municipal. Tanto De Dios como Campa hicieron un llamamiento a la prudencia. "Parece que estamos celebrando que el virus ha pasado, pero sigue ahí", advirtió, al tiempo que aplaudió el "sacrificio" del conjunto de la sociedad asturiana para hacer frente a la pandemia. Apeló también a la "solidaridad y unión" para lograr una desescalada exitosa.