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Las cámaras de vigilancia, claves en la investigación de la muerte del maliayés atacado por dos jóvenes que celebraban la EBAU

Javier Solares, trabajador de la rula de Gijón y gaitero, cayó al suelo al recibir un puñetazo en la madrugada del domingo l Dos detenidos de 18 y 19 años

Javier Solares, tocando la gaita.

Javier Solares, de 46 años, trabajador de la rula de Gijón que fue miembro de la Banda de Gaites de Villaviciosa y de la asociación vecinal de Lugás, falleció en la madrugada del domingo como consecuencia de una agresión por parte de varios jóvenes en la localidad de Potes (Cantabria).

Las primeras investigaciones apuntan a que el maliayés, residente en Santa María de Lugás y que pasaba unos días de descanso en la capital lebaniega junto a su pareja, recibió varios golpes como consecuencia de los cuales quedó tendido en el suelo, inerte. Los denodados esfuerzos por reanimarle de los equipos sanitarios desplazados al lugar, que se prolongaron durante unos cuarenta y cinco minutos, resultaron inútiles. Los presuntos agresores, según fuentes de la investigación, se dieron a la fuga, aunque fueron localizados poco después por la Guardia Civil, que procedió a su detención. Son: C. S. V., de 18 años y vecino de Potes, y A. F. D., de 19 años y vecino de Torrelavega. No obstante, el Instituto Armado investiga si hubo más personas implicadas en la pelea.

Entre las pesquisas que ya se están realizando figura la revisión de todas las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad de diferentes locales, en especial de las de una entidad bancaria situada justo enfrente del lugar en el que Javier Solares perdió la vida, en las que se supone que quedó registrado el desgraciado episodio.

El luctuoso suceso ha provocado conmoción tanto en Villaviciosa como en Potes, adonde Javier Solares y su pareja habían viajado para visitar a la hermana de esta, guardia civil destinada en la localidad desde hace unos meses, según fuentes de la localidad cántabra.

Las primeras averiguaciones de los agentes del orden, aún provisionales, apuntan a que habría sido C. S. V. quien, presuntamente, propinó un puñetazo a Javier Solares que le hizo caer al suelo. Así como a que A. F. D. le golpeó después, cuando ya estaba en el suelo, con el pie. Aunque todo está aún en el aire.

La autopsia, que se practicará en las próximas horas, aclarará si el asturiano murió al golpearse contra el suelo o si el óbito se produjo como consecuencia del golpe o los golpes recibidos. Los dos detenidos permanecen en los calabozos del acuartelamiento de la Guardia Civil de San Vicente de la Barquera, donde están siendo interrogados por los agentes. Aunque la detención aún podría demorarse hasta las 72 horas, está previsto que pasen a disposición judicial esta misma mañana en los juzgados de la localidad barquereña.

Los vecinos de Potes no daban crédito a la ocurrido. "Pero si aquí nunca pasa nada. Son cosas que lees en los periódicos y crees que solo pasan en otros sitios, lejos. Estamos en shock", comentaba a primera hora de la tarde una empleada de una tienda de alimentación, que aportaba más datos: "Aquí en Potes no hay cultura de botellón, pero anoche hubo varias celebraciones de estudiantes. Hubo mucho movimiento de chavalería y los implicados son de esa edad. No sé si tendrá que ver con lo ocurrido", añadió. Según la dependienta, los detenidos son "chavales normales, deportistas, de familias trabajadoras, que nunca dieron ningún problema ni tuvieron ningún conflicto conocido. Aún no nos creemos lo que ha pasado".

"Un pobre hombre muerto y dos familias destrozadas seguramente por una tontería. No hay derecho. Mucha violencia, empezando por los políticos. Da mucho miedo", exclamó la dueña de una tienda de la capital lebaniega, que resaltaba no obstante que Potes siempre ha sido "una localidad muy tranquila".

En esta misma idea incidía Javi Gómez, turista vallisoletano. "Llevo viniendo a Potes desde hace varios años y nunca había pasado nada. Es un sitio súper tranquilo". No conoce a ninguno de los implicados, pero tiene claro que "cualquiera que haya sido el origen de la discusión, no se puede ir por la vida dando puñetazos". En su opinión, lo que ahora se impone es que los culpables "paguen por lo que han hecho".

"No son conflictivos", afirman amigos de los presuntos agresores

"No son conflictivos", afirman amigos de los presuntos agresoresPese al mutismo generalizado, las manifestaciones de unos pocos vecinos de Potes, en especial de varios estudiantes del instituto local, donde cursa estudios C. S. V., recogidas por LA NUEVA ESPAÑA, permiten recomponer en gran medida su versión de lo ocurrido en la madrugada del sábado al domingo en Potes, hasta el momento del fallecimiento de Solares.

Cuatro estudiantes de la localidad señalaron que en la jornada del sábado se organizaron varias cenas estudiantiles en Potes y en la vecina localidad de Ojedo. Algunos jóvenes celebraban la superación de la prueba de acceso a la universidad, la EBAU, celebrada días atrás, mientras que otros se reunían con motivo del final del curso, puesto que no se habían podido juntar desde hacía meses a causa de la pandemia, y muchos de ellos vieron cómo se suspendían los viajes de estudios. Algunos de los participantes en estos eventos continuaron las celebraciones en la única discoteca de Potes, La Ruina, donde según señalaron los estudiantes que hablaron con este periódico pudo comenzar el rifirrafe entre algunos de los integrantes de la pandilla de C. S. V. y A. F. D. y el asturiano fallecido.

Pero la pelea se desarrolló fuera, en la calle, en la principal avenida de Potes, justo delante del bar Cantón, que en ese momento estaba ya cerrado. Un empleado del local, que no fue testigo directo del suceso aunque llegó muy poco tiempo después de la agresión, daba ayer por sentado que fue "mala suerte" y aventuraba que la muerte quizá se produjo debido al golpe de la cabeza del asturiano contra el suelo, porque los presuntos autores del ataque son "chavales normales, nada conflictivos".

Esta última idea fue repetida por varias personas más. Otras dos estudiantes del instituto de Potes incidían en que al menos el supuesto agresor residente en Potes es "un chaval normal", al que nunca antes habían visto metido en líos. "Al otro no lo conozco más que de vista", añadían.

Otro alumno de Bachillerato repetía esa misma idea sobre C. S. V. y sus amigos, aunque señalaba la posibilidad de que en el suceso hubiera tenido algo que ver "la bebida, porque el sábado hubo mucha fiesta y mucho alcohol". Además, "ya sabemos que el alcohol hace que algunas personas se pongan muy gallitas, aunque no digo que sea esa la razón de lo ocurrido", añadió el chaval.

Otro estudiante revelaba por su lado que C. S. V. había cursado hasta cuarto de la ESO y después "se pasó a Formación Profesional", donde estudiaba un módulo relacionado con su gran pasión: la bicicleta de montaña. De hecho, C. S. V. pertenece desde hace varios años al Club Liébana y ha participado en diversas pruebas de BTT en Cantabria, con excelentes resultados en numerosas ocasiones.

Dos estudiantes de bachillerato resaltaron que ninguno de los dos detenidos, a los que conocen "desde siempre", habían tenido "nunca ningún problema, ni peleas. Por eso nos extraña lo ocurrido. Tuvo que haber algún motivo. No lo entendemos", resaltó la única mayor de edad de estas dos alumnas.

Fuentes de la Delegación del Gobierno señalaron ayer que Javier Solares falleció "presumiblemente por los golpes que le propinaron los dos jóvenes", que fueron posteriormente detenidos y que permanecen bajo custodia de la Guardia Civil. Los agentes del Instituto Armado y la Policía Judicial siguen investigando los motivos por los que comenzó la disputa y los hechos ocurridos que desembocaron en la muerte de Javier Solares. Asimismo, en las próximas horas los forenses realizarán la autopsia al cadáver para determinar la causa del fallecimiento.

La Guardia Civil reveló que se personó junto con el 112 de Cantabria en la zona del suceso a la una y media de la madrugada del domingo, en cuanto tuvo conocimiento de lo ocurrido por un testigo presencial, que aseguró que el agredido se encontraba tirado en el suelo. Los médicos no pudieron hacer nada por salvar la vida al maliayés. Un rastreo de la zona realizado por los agentes del Instituto Armado permitió la rápida identificación de los dos implicados.

Las cámaras, claves en la investigación

Una de las "claves" para la resolución del crimen de Potes está en las imágenes de las cámaras de seguridad de una oficina del Banco de Santander ubicada justo enfrente del lugar en el que Javier Solares perdió la vida. La Guardia Civil ya se ha hecho cargo de las grabaciones y confía en esclarecer definitivamente el origen del conflicto y el alcance de la agresión.

Un caso que recuerda al de David Carragal

Las circunstancias que rodean la muerte de Javier Solares recuerdan el caso de David Carragal, el maestro de Cudillero que falleció el año pasado tras recibir una patada en la cabeza en las fiestas del barrio ovetense de La Florida. Los hechos también ocurrieron de madrugada, y en el transcurso de una discusión en la que un joven llanisco le propinó una patada que alcanzó a la víctima en la parte derecha de la cabeza que le hizo caer de espaldas semiinconsciente y a plomo, y golpearse violentamente la zona parieto-occipital contra el suelo. El acusado y sus dos acompañantes huyeron, sin sospechar que el profesor yacía muerto. Las graves lesiones originadas por la caída al suelo fueron las causantes del fallecimiento. En este caso fue el propio acusado y sus dos acompañantes quienes se entregaron, aunque finalmente solo se inculpó al que propinó la patada. Desde junio del año pasado está en prisión, a la espera de que se celebre el juicio con un jurado popular. La Fiscalía califica los hechos de homicidio y la acusación particular, de asesinato. La defensa mantiene que es un homicidio imprudente, "un accidente".

Llaman a una concentración

Los amigos de Xavi Solares tienen previsto celebrar una protesta esta tarde en Villaviciosa para condenar su muerte violenta. "Creemos que deberíamos hacer una concentración silenciosa y guardando todas las medidas de seguridad. Creemos que los vecinos tenemos que condenar este tipo de conductas. Nuestros hijos nos lo van a agradecer. No cabe la violencia. Nunca", comentaron los amigos más cercanos a un hombre muy conocido en la comarca por su implicación con la comunidad y su faceta como gaitero. Esa concentración fue tomando cuerpo a lo largo de la tarde, incluso haciendo una llamada a todos los que tocan la gaita en Asturias para que acudan a las 20 horas a la zona del ayuntamiento maliayés. "Homenaje a un paisano de bien, a un gaitero de corazón. Ningún crimen quedará impune, ningún gaitero sin homenaje", difundieron sus amigos.

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