El lento progreso del coronavirus en Asturias añadió ayer a la cuenta el caso oficial número trece de la "nueva normalidad", el positivo "importado" de un joven que estuvo de camping en el Pirineo aragonés, fue atendido en un centro de salud del Valle del Nalón y quedó aislado en su domicilio con síntomas leves. Es el segundo contagio detectado a la vuelta de un viaje a Aragón tras el de un ovetense procedente de Zaragoza que fue notificado el lunes. La relación, a la que la Consejería de Salud añade por precaución la infección dudosa y no confirmada ni transmitida al Ministerio de un usuario de un geriátrico de Luarca, avanza muy poco a poco y a base de casos mayoritariamiente vinculados con focos de fuera de la región. Los datos nacionales de la pandemia insinuaron ayer, mientras tanto, cierta tendencia a la ralentización en el aumento de positivos, con recuento de 529 contagios que supone rebajar en 156 los del lunes.

El rastreo de los orígenes de cada caso, cuestión clave en el control de la pandemia, arroja sin embargo algún detalle preocupante en el conjunto del país. Según los últimos conocidos, divulgados por el Instituto de Salud Carlos III y la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica, no hay constancia de cómo se ha contagiado la mitad de las 25.618 personas que se han infectado entre el 10 de mayo y el 17 de julio en todo el país. En Asturias, la misma fuente sitúa el dato en uno de cada tres casos de los que no se ha identificado ningún contacto con otro positivo por covid-19. El porcentaje asturiano, que permanece lejos del inquietante 74 por ciento de Cataluña, únicamente es mejor en País Vasco, Canarias, Madrid, Andalucía y Aragón.

Según esos recuentos, la mediana de edad de los casos continúa descendiendo y se ha situado en 44 años, frente a los sesenta de antes del 10 de mayo. El impacto de la pandemia se ha dado la vuelta y el grupo de población con más contagios es ahora el de los jóvenes: el 19,2 por ciento de los casos detectados desde el 11 de mayo afectaban a chicos de 15 a 29 años.

La nueva media de contactos identificados por cada caso se sitúa entre dos y siete personas, con grandes diferencias entre comunidades, ya que Canarias puede detectar hasta veinte contactos, mientras que La Rioja no localiza a más de cuatro. La última actualización excluye los datos de Asturias, además de los de Castilla La Mancha, Cataluña y Madrid por "dificultades en la categorización de la variable". El recuento anterior de las fuentes oficiales adjudicaba al Principado una mediana de vínculos localizados de uno por infectado y un máximo de tres. El presidente del Principado, Adrián Barbón, matizó sin embargo el lunes estas informaciones, asegurando que la red de vigilancia asturiana es capaz de identificar hasta nueve contactos por afectado. La directora general de Salud Pública, Calidad e Innovación del Ministerio de Sanidad, Pilar Aparicio, atribuyó ayer a la eficacia del rastreo el éxito de haber detectado entre un 50 y un 75 por ciento de contagios asintomáticos.

Mientras siguen las medidas de precaución, y en Barcelona el Ayuntamiento decidió ayer reducir un 15 por ciento el aforo de las playas, los colectivos más afectados hacen evaluación de daños. La última actualización del observatorio empresarial constituido en la plataforma "Juntos por la hostelería" calcula que 40.000 negocios ya han echado el cierre, que si nada lo remedia 65.000 habrán desaparecido a fin de año. En último extremo, lamentan, si la crisis empeorara podría verse afectada la supervivencia de hasta 85.000 establecimientos. La pérdida de empleos podría rondar el millón, entre directos e indirectos; las pérdidas, los 67.000 millones de euros.