Prohibidos los botellones en Asturias. La Consejería de Salud publicó ayer por la tarde, por sorpresa, en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA) una resolución por la que se "prohíbe expresamente la aglomeración incontrolada de personas para el consumo de alcohol en las vías públicas, parques, plazas y otros lugares de tránsito". Y añade que "el objetivo es evitar brotes de coronavirus asociados a la celebración de los popularmente conocidos como botellones, que habitualmente conllevan una relajación o ausencia del cumplimiento de las medidas de seguridad y de distanciamiento social".

Evitar los botellones es competencia de los ayuntamientos, de ahí que el Principado haga expresa referencia a ellos en el texto. "Las administraciones locales correspondientes deberán adoptar las medidas oportunas para impedir las concentraciones de personas con esta finalidad", les advierte. La prohibición, aclara Salud, no afecta al consumo en las terrazas de bares y restaurantes, ni a las fiestas, verbenas y otros eventos populares que cuenten con el permiso o la autorización pertinentes.

El ocio nocturno está en el ojo del huracán y las comunidades autónomas de todo el país han empezado a ponerle coto en un intento de frenar los contagios, porque la transmisión se dispara.

Desde ayer, todos los locales de ocio de Cantabria deberán cerrar sus puertas a las dos de la madrugada, y además los clientes deberán dar el número de teléfono para entrar en bares de copas. Cataluña empezó por Barcelona, pero ayer decidió extender la clausura de las discotecas, salas de baile y salas de fiesta con espectáculos, ante el avance de los contagios, durante al menos 15 días. Y siguen creciendo las comunidades autónomas en las que aplican restricciones o cierres a este sector, como Aragón, Murcia, y Navarra, y para la semana que viene se esperan medidas similares en el País Vasco y Andalucía.