Los hosteleros de Avilés reprochan la confusión sobre las medidas restrictivas. "Ni el cliente ni nosotros sabemos a qué atenernos. Nadie tiene nada claro", explica José Manuel Tedín, dueño de El Portón, en la plaza Alfonso VI. Por su parte, Juan Carlos Pomar, dueño del bar Doya, situado en la calle Pedro Menéndez, afirma estar "muerto de miedo". "Tengo un aforo para 13 personas, sin las cinco que pueden entrar en la barra me quedo en nada", lamentaba.