La Comisión Europea autorizó ayer a Asturias y al País Vasco a desviar fondos de cohesión por un importe de 150 millones de euros a la sanidad, para hacer frente al covid-19. Una decisión que el presidente del Principado, Adrián Barbón, calificó de "importante" para los intereses de la región. La iniciativa de la Comisión permitirá "flexibilidad total" para redirigir recursos a las áreas más castigadas por la crisis actual, de tal forma que territorios afectados por el coronavirus puedan tener acceso a fondos extraordinarios para dar respuesta a las necesidades sanitarias generadas por la pandemia.

Asturias es junto a La Rioja la segunda comunidad autónoma con menor número de ingresos hospitalarios, tres, en la última semana por casos de covid-19, según los datos oficiales del Ministerio de Sanidad. Sólo por delante está Castilla-La Mancha, que contabilizó uno.