Un funcionario de la cárcel de Asturias ha dado positivo por coronavirus, lo que obligó a aislar durante unas horas dos módulos de la prisión, el 9 y el 10, debido a que alguno reclusos del mismo habían mantenido contacto con ese trabajador. En la tarde de ayer, sin embargo, los análisis realizados a cuatro reclusos que habían tenido contacto estrecho con ese funcionario dieron negativo, por lo que se levantó la cuarentena impuesta a los dos módulos. No obstante, hay otros tres trabajadores pendientes de los resultados de sus análisis y aislados en sus domicilios, por si presentasen síntomas de la enfermedad. Instituciones Penitenciarias había suspendido los contactos y visitas de los citados módulos, uno de los cuales, el 10, corresponde a las mujeres.

La sección sindical de ACAIP-UGT, con el fin de detener la propagación del virus en la prisión, ha reiterado las medidas solicitadas el pasado día 11 ante la dirección, como son el aplazamiento de los permisos ordinarios, la suspensión de las comunicaciones especiales íntimas y familiares, y la reducción de las comunicaciones orales, a la mitad de los locutorios disponibles y a dos personas por interno. "Aun sabiendo que es impopular, las medidas pretenden salvaguardar la vida y minimizar el contagio de covid-19 entre las personas que convivimos en el centro penitenciario y de las familias con las que tenemos contacto", indica el sindicato.

Por su parte, CSIF ha solicitado la convocatoria urgente del Grupo de Trabajo de Prevención de Riesgos Laborales, así como la del Comité de Seguridad y Salud en el Centro Penitenciario de Asturias, para disponer de todo tipo de información en tiempo real de cara a planificar estrategias eficaces frente a esta crisis. También pide implementar medidas urgentes de prevención para evitar contagios generalizados, tanto entre los trabajadores como entre la población reclusa.