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Los montañeros piden que se sancione a los turistas "imprudentes"

La cantidad de rescates que está habiendo este verano en los montes preocupa a la Federación de Montaña del Principado de Asturias (FEMPA), que afirma que gran parte de ellos son consecuencia de "imprudencias". Ante esto, la federación pide que el Principado sancione económicamente a aquellas personas que soliciten ayuda a los servicios de emergencias al encontrarse en situaciones de peligro provocadas por sus propios descuidos. Reclaman que estas multas se extiendan a turistas y aficionados y no se queden únicamente en deportistas de montaña. Juan Rionda, presidente de la FEMPA, "no duda" de que si las sanciones se llevan a cabo, serán efectivas. "La mayor parte de estos sucesos se dan por no hacer caso al ser advertidos de no pasar por algún sitio o por subestimar la climatología", asegura.

Respecto a la cuantía de las sanciones, Rionda indica que "si son de 100 euros igual la gente sigue como si nada, pero si la multa asciende a los 600 euros o más entonces puede que se lo piensen dos veces". A lo que añade que "esto dependería de la situación en la que se encuentre el accidentado. Con un comité, un informe o según el testimonio de la persona rescatadora se decidiría si ha sido a causa de una imprudencia y se determinaría la sanción".

El presidente de la fundación espera que el miedo a la multa evite gastar recursos en situaciones que no los requieren. "La gente está muy acostumbrada a pedir ayuda ante el menor problema que se les presenta", denuncia. Sin embargo, cometer imprudencias no es solo cosa de turistas inexpertos, también aficionados a la montaña que no quieren hacer caso de las recomendaciones provocan accidentes injustificados. "El hecho de que se impongan sanciones no quiere decir que estas vayan a parar al típico turista", explica el presidente de la federación.

Los rescates por cansancio, falta de prevención del esfuerzo físico o desorientación, son aquellos que serían susceptibles de ser sancionados económicamente. Todo ello viene a raíz de que este verano el Principado está recibiendo visitantes de todas las partes de España que buscan un destino alejado de los contagios. Sin embargo, por otra parte, la gran afluencia de gente está provocando cada vez más accidentes en la montaña. "Por ser inexperto no tienes por qué poner en riesgo la seguridad de los demás, existen información y medidas de prevención suficientes para evitar este tipo de situaciones", explica Juan Rionda.

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