La consejera de Educación, Carmen Suárez, se mantuvo ayer firme a las duras críticas de la oposición y negó por activa y por pasiva un recorte en las plazas docentes de atención a la diversidad. "Por más que lo repita no va a ser verdad, no hay recorte", contestó a la diputada de Podemos Nuria Rodríguez, que no fue la única en el Pleno de la Junta General del Principado que cargó contra la gestión del covid en las aulas. También lo hicieron Ana Gloria García, del PP, e Ignacio Blanco, de Vox. "Entre las dos convocatorias -la de julio y la de septiembre- salieron 197 plazas de interinos de Pedagogía Terapéutica y 146 de Audición y Lenguaje. Son cifras superiores a las del año pasado. Si eso es recortar...", insistió Suárez.

La diputada de Podemos Nuria Rodríguez acusó a la Consejera de "hacer trampas" y señaló que cerca del 90% de las plazas convocadas en estas especialidades son a media jornada. Lo cual quiere decir, enfatizó Rodríguez, que "han reducido horas de atención a la diversidad y que han sacado fuera de la ecuación a los niños con necesidades especiales". A estas quejas se suman las de Ignacio Blanco (Vox), que lamentó que los niños de Educación Especial son "los grandes abandonados". En este sentido, la titular de Educación aseguró que la atención a estos alumnos, distribuidos en once centros, es una "prioridad" para su Gobierno.

Especialmente dura con la Consejería fue la intervención de la popular Ana Gloria García. Habló de "improvisación, falta de diálogo, falta de respuesta...". Carmen Suárez lo negó todo y sacó pecho de su gestión, recordando, entre otras cosas, que el Principado hará un esfuerzo económico extra para este curso de hasta 40 millones de euros. El retraso del inicio de las clases responde a la búsqueda de "un comienzo seguro y estable", dijo, con pruebas PCR que "se convocan en tiempo y forma". "Aquí no hay colas como en Madrid", señaló. Las pruebas ya han comenzado a practicarse al profesorado asturiano.