Una investigación con sello asturiano demuestra que el cambio climático adelanta el envejecimiento de los anfibios, insectos, peces y reptiles -no pueden regular su temperatura corporal-. En el artículo, publicado en la revista "Global Change Biology", participa Germán Orizaola, científico del Instituto Mixto de Investigación en Biodiversidad -perteneciente a la Universidad de Oviedo, el CSIC y el Principado de Asturias-, además de los profesores de la Universidad de Glasgow Pablo Burraco, Pat Monaghan y Neil Metcalfe.

Si bien el efecto de la temperatura sobre la fisiología de los animales se ha estudiado con detalle, hasta ahora no se había prestado atención al efecto que estos cambios fisiológicos pueden tener sobre el envejecimiento de los organismos. La subida de las temperatura genera un aumento de estrés oxidativo y degrada los telómeros de los cromosomas, llegando antes la muerte celular.