Alivio contenido en el cuarto día de alerta naranja en el municipio de Laviana. El alcalde, Julio García, se manifestó en la tarde de ayer "moderadamente optimista" con la evolución del brote de coronavirus detectado en el concejo tras conocer que solo nueve de las casi quinientas pruebas realizadas a lo largo del fin de semana a los jóvenes del municipio tuvieron un resultado positivo. Ese foco, que afecta principalmente a los adolescentes, suma más de una treintena de casos. En total, el Principado reportó diez casos detectados en residentes en Laviana, incluyendo otros ajenos al brote.
El recinto ferial fue el lugar elegido para que los jóvenes de entre 13 y 18 años del municipio se hicieran los test PCR. El sábado y el domingo se realizaron un total de 474 pruebas entre los vecinos que se inscribieron, con nueve positivos. Otros 200 adolescentes englobados en ese segmento de edad también pueden solicitar someterse al test si así lo desean, aunque deberán hacerlo ya el punto autocovid instalado en el Hospital del Valle del Nalón. "Los jóvenes que están a la espera de que el Sespa se comunique con ellos para practicarles la prueba deben limitar su vida social, vigilar su estado de salud y cumplir rigurosamente con las medidas de protección", remarcaron ayer desde el Principado.
El regidor lavianés aseguró que "soy moderadamente optimista porque la situación no parece haber sido tan grave como en un principio podíamos pensar. Estamos orgullosos del compromiso de los jóvenes del concejo, que han respondido mayoritariamente al llamamiento que se hizo. Y lo hicieron, además, de forma disciplinada para evitar aglomeraciones y mostrando su colaboración para facilitar los contactos estrechos y acotar el virus. También quiero alabar el trabajo de los sanitarios. Debemos continuar alerta y seguir todas las medidas de control indicadas".
La comarca del Nalón sumaba a fecha del pasado domingo unos 150 casos activos de covid-19, con Langreo y Laviana como principales focos y menor incidencia en San Martín del Rey Aurelio. No todos estos positivos están vinculados con una expansión generalizada por el resto del Valle del brote de Laviana, sino que se explican por el goteo derivado de la evolución al alza de la epidemia. En Langreo, el Ayuntamiento tuvo que cerrar ayer el departamento de Rentas por el positivo de un trabajador.
La Policía Local de Carreño identificó este sábado a más de 20 personas que estaban participando en una especie de fiesta privada en un bar de Candás. El establecimiento hostelero, ubicado entre la plaza de La Baragaña y el parque de Les Conserveres, en pleno centro de la villa marinera, tenía sus puertas cerradas y los cristales tapados con papeles que impedían ver qué ocurría en su interior. Dentro, un grupo de personas se reunió y puso música a alto volumen. De hecho, vecinos de Candás que pasaron por la zona se sorprendieron al escuchar jolgorio en su interior.
Los agentes de la Policía Local acudieron al establecimiento y, según la alcaldesa de Carreño, Amelia Fernández, faltaron al respeto a los agentes, por lo que se "tramitaron las denuncias correspondientes a la Consejería de Sanidad y a la Delegación del Gobierno". Las reuniones están limitadas a un máximo de 10 personas y los no convivientes deben ir provistos de mascarillas así como mantener un metro y medio de distancia para evitar contagios por covid-19, requisitos que se incumplían en ese local de Candás.
En cuanto a los locales cerrados en Nava por precaución, continuarán clausurados por decisión del matrimonio propietario, al dar positivo la prueba PCR realizada al cocinero de uno de ellos, una sidrería ubicada en el centro de la localidad. Guillermo Torres, el dueño, afirmó ayer que "ahora tenemos que estar 14 días cerrado, nos van a hacer otra PCR a todos. Hay que esperar. Nos lo tomaremos como unas minivacaciones, aunque no podremos hacer nada porque tenemos que estar aislados en casa".
