La huerta asturiana a veces sorprende con exuberantes productos. Para ejemplo, sin ir más lejos, el espectacular repollo de 4,300 kilogramos que Jorge Montes Prieto, "Jorgín", obtuvo en la huerta que atiende en Triongu, en término municipal de Cangas de Onís. Pero no se queda ahí la cosa. Nada menos que 106 gramos pesó un llamativo huevo en Llanu Con, también en Cangas de Onís, puesto por una gallina de Gemma Suero Sánchez, quien se sorprendió en un primer momento. Lo comparó con otros, igualmente de la misma raza de gallinas, rondando estos últimos apenas 60 gramos. Toda una curiosidad y más en los tiempos de la incertidumbre por la pandemia del covid-19. "Es una excepción. Me imagino que tenga dos yemas", dijo la propietaria de las gallinas. J. M. C.