El ministerio que dirige María Jesús Montero tiene entre sus planes crear un fondo para los ayuntamientos sin remanentes, que se quedarían fuera de la fórmula que permite destinar a gasto los ahorros acumulados en los últimos años. El grueso de los consistorios asturianos acumula remanentes que en total suman más de 260 millones de euros, pero hay algunos como es el caso de Amieva, Peñamellera Alta, Ponga y Salas, que no disponen del “colchón” de ese remanente y, por lo tanto, ahora tendrían más estrecheces para hacer frente, por un lado, a los gastos adicionales asociados al covid-19 y también a la caída de ingresos como consecuencia de la pandemia.
María Jesús Montero comentó días atrás en una entrevista concedida a la agencia Efe que propondrá al resto de formaciones políticas crear un fondo de compensación para los ayuntamientos sin remanentes o en crisis por la brusca caída de ingresos como consecuencia de la crisis derivada de la pandemia. Esta iniciativa ha sido sugerida desde la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) después de que se confirmase la suspensión de la regla de gasto y el levantamiento de las limitaciones incluidas en las leyes de estabilidad presupuestaria, medidas extraordinarias que han recibido la luz verde de Bruselas.
El presidente de la FEMP y alcalde de Vigo, Abel Caballero, había negociado con el Gobierno central la creación de un fondo de 5.000 millones de euros a fondo a repartir entre los ayuntamientos, a fondo perdido. Pero este plan, incluido en el mismo mecanismo mediante el cual el Gobierno devolvería en un plazo de 10 a 15 años los ahorros acumulados por los ayuntamientos, se encontró con el rechazo de todos los partidos del Congreso, salvo el PSOE y fue devuelto al Ministerio de Hacienda: el citado fondo incondicionado quedó en papel mojado. Los ayuntamientos sin ahorro esperan ahora que la propuesta lanzada por Montero pueda materializarse para tener una vía adicional de captación de ingresos en un escenario económico muy adverso.
