La ampliación de Urgencias del Hospital de Cabueñes entrará en funcionamiento la próxima semana, según lo previsto por sus responsables. La obra lleva ya semanas finalizada, pero faltaba la instalación del equipamiento. Una labor que ya ha acabado. Actualmente, apenas queda por hacer una serie de actuaciones de menor calado, como instalar el wifi. Prueba de que la puesta en funcionamiento del nuevo espacio es inminente es que la gerencia del hospital ya tiene el personal para abrirlo.
Este nuevo espacio permitirá un aumento considerable de boxes de observación, con hasta quince nuevas unidades, además de urgencias pediátricas y una separación de circuitos que evite contagios cruzados por coronavirus. Ese es uno de los fines fundamentales: el de poder separar a los pacientes con covid-19 o con sospechas de estar infectados de aquellos otros que no.
Este espacio, situado en la planta cero del hospital, se ganó a consultas y a almacenes que estaban infrautilizados en los meses de pandemia. Cada nuevo puesto tendrá monitorización centralizada, carro de paradas con desfibrilador y marcapasos externo, electrocardiógrafo, robots de constantes vitales, ecógrafo, calientasueros y respirador, entre otras mejoras.
Además, el hospital gijonés tenía ayer diez pacientes positivos en coronavirus en planta -octava par- y otros trece sospechosos de estar infectados, a falta de la realización de las pertinentes pruebas. Ese es actualmente el mayor problema del centro hospitalario, ya que esa planta séptima par tiene cabida para únicamente catorce pacientes, por lo que está a un ingreso de saturarse. De ser así, esos pacientes pasarían, como ya ocurrió, al área de Urgencias, aumentando su saturación. De ahí la importancia de poder poner en funcionamiento cuanto antes el nuevo espacio ampliado. No obstante, en el hospital gijonés no había ayer ningún infectado por coronavirus en la unidad de cuidados intensivos.
