El Sindicato Médico de Asturias (SIMPA) aprobó ayer que se sumará a la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) si decide convocar una huelga nacional indefinida de facultativos. La eventual movilización comenzaría el 27 de octubre y se celebraría el último martes de cada mes. El motivo de la protesta es el real decreto-ley aprobado la semana pasada por el Gobierno que permite la contratación de titulados en medicina que carezcan del título de especialista reconocido en España o de extracomunitarios que tengan pendiente la homologación de su título. "Es la puntilla del Sistema Nacional de Salud", argumentó el secretario general del SIMPA, Antonio Matador.