La popularización de las redes sociales de críticas a restaurantes han abierto una vía de comunicación entre establecimientos y clientes que en algunos casos es muy provechosa y, en otros, no tanto. Sobre todo por las fricciones que puede generar entre empresarios y usuarios. En ocasiones, esto deriva en encontronazos que acaban por hacerse públicos. Es el caso de un establecimiento de Avilés, cuyo propietario acabó por estallar contra una, en su opinión, injusta mala crítica: "Es muy fácil ponernos a parir".

Se trata de un establecimiento especializado en cachopos. En su página de la web TripAdvisor, un presunto cliente carga contra el funcionamiento del establecimiento: "Pedimos unos cachopos al servicio de domicilio. Nos dan de plazo unos 40 minutos, una hora después nos llaman y nos dicen que la comanda se les había caído al suelo y que teníamos que esperar una cola de dos horas, ya que en ese momento tenían mucho pedidos. Anulamos el pedido", criticó en un texto titulado "Servicio a domicilio muy muy malo".

La respuesta del establecimiento no se hizo esperar. En primer lugar, se disculparon con el cliente, al que le explicaron que en el momento de ese supuesto error el restaurante estaba funcionando a pleno rendimiento y las dificultades de estos servicios: "Existen diferentes variables que hacen que esto sea difícil de narices".

Si bien, la opinión y las formas del usuario acabó calentando al empresario, que saltó: "Lo fácil de todo esto es ponernos a parir sin saber realmente todo el trabajo que hay detrás, y decir incluso sin probar nuestro producto que somos muy muy malos". El empresario también argumentó ante el cliente que el actual sistema de servicio a domicilio que emplean en la empresa les llevó dos años de trabajo desarrollarlo. "Me he pasado horas y horas definiendo el empaquetado, desarrollando la web, definiendo procedimientos, formando al personal y sigo todos los días pensando en cómo mejorar. Sé que lo hacemos muy muy bien", concluyó.

El La inmensa mayoría de ellas son positivas y predominan las que califican de "excelente" el restaurante.

La proliferación de este tipo de redes sociales ha sido denunciada por numerosos profesionales del sector hosteleros como un arma de doble filo. Aplauden que, por un lado, mejoran la comunicación con los clientes; si bien, también denuncian que son focos de críticas, muchas de ellas infundadas, que los internautas firman desde el anonimato.