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Álvaro Queipo | Secretario general del PP de Asturias

"Asturias no está para brindis al sol, la oferta de pactos de Mallada es sincera"

"Nuestra industria pesada necesita un Gobierno regional que sea beligerante y que meta presión política en Madrid"

Álvaro Queipo Irma Collín

Su designación como secretario general del PP asturiano por parte de Teresa Mallada cogió por sorpresa filas adentro de un partido que llevaba sin actividad hace más de un año. Álvaro Queipo (1988) toma el encargo con ganas de "arrimar el hombro". Forjado en su juventud en la práctica del remo, tiene muchas paladas por delante para que la nave popular avance en Asturias. Lleva la política en su ADN: su abuelo, José Luis Somoano, fue el primer alcalde de la democracia en Cangas del Narcea.

-¿Le sorprendió la llamada de Teresa Mallada para ser el "número dos" en Asturias?

-La verdad es que sí, pero estoy enormemente agradecido. La gente espera que se haga mucho trabajo y en eso nos tenemos que centrar, más allá de los nombres. Llevamos más de un año sin partido y necesitábamos ya una estructura para dar cobertura a toda la gente que tenemos por toda Asturias y que estaban desamparados.

-¿Cuándo se lo comentó?

-En el momento oportuno, lo supe y esperé pacientemente, como tienen que ser estas cosas.

-¿Tuvo que mantener el secreto muchos días?

-Un tiempo determinado, sí.

-¿Qué puede aportar desde sus 32 años, pero con una amplia trayectoria en el partido, al que se afilió en 2008?

-El proyecto de Teresa Mallada es un partido que sea cercano y pendiente siempre de lo que pasa en el territorio. Hay que dar servicio a los afiliados y cobertura a los concejales repartidos por todos los concejos. Toda esa gente está haciendo una labor inmensa, que no está retribuida, y está sacrificando vida personal por dar un servicio a sus vecinos. Aquí hubo cantidad de gente nueva que se incorporó a los ayuntamientos hace meses y se han visto con un vacío, en una situación inaudita. Van a notar que ya no están solos.

-¿Cuáles son las expectativas de este nuevo proyecto?

-Hay muchísima ilusión y mucho trabajo por hacer, que puede ser muy gratificante. Tenemos que reforzar o extender la red de juntas locales por toda Asturias. El partido estaba desaparecido hace meses y ahora hay que retocar muchas cosas. Lo fundamental es que el PP esté presente en todos los concejos de Asturias y representando a los afiliados.

-Va tener mucho que remar. ¿Por dónde empezará?

-Un amigo, que es cargo del PP y no en Asturias, me dijo que ser secretario general no es ser el segundo que manda sino el primero que arrima el hombro. Este será mi objetivo. Teresa Mallada quiere un partido cercano a los afiliados y de gente normal. No podemos hacer política desde un despacho en Oviedo y pretender que nos escuche la gente que está en Villaviciosa o dando un paseo por Vegadeo. Ahora que la política está tan denostada tenemos que pisar poco despacho y quemar mucha rueda.

-¿Las ocho alcaldías del PP son suficiente músculo para disputar al PSOE el gobierno de Asturias o la prioridad pasa por lograr los 130.000 votos que fueron a Ciudadanos, Foro y Vox que tampoco tienen mucha presencia municipal?

-En estas últimas elecciones teníamos la mejor candidata que se presentó al Principado, que era Teresa Mallada, y los mejores candidatos a las Alcaldías, pero no tenían el partido que les diera el músculo que merecían. El PP no estuvo a la altura como organización en las elecciones autonómicas y municipales de 2019. Y eso es lo que tenemos que corregir. Evidentemente 8 alcaldías de un total de 78 no es suficiente ni una cifra con la que el PP pueda estar satisfecho.

-Ustedes han hecho hincapié este año en las tres décadas de gobierno socialista, con resultado bastante pobres para Asturias. Algo habrá tenido que ver el PP con esa hegemonía.

-Adrián Barbón es la guinda a las décadas de gobiernos socialistas y viene acompañado de un lazo precioso que es la propaganda. Ya había una crisis económica y ahora la pandemia está desbocada. Aunque el PP arrima el hombro, planteando propuestas, el Gobierno de Barbón ni nos contesta ni se sienta a dialogar. En Asturias tenemos un presidente que solo está preocupado en que su imagen salga reforzada de esta crisis.

-Teresa Mallada se estrena pidiendo una concertación política para que los dos principales partidos vayan de la mano en Asturias en este momento tan crítico. ¿Es una oferta sincera o un brindis al sol?

-Los asturianos no están para brindis al sol ni para palabras vacías. El ofrecimiento de Teresa Mallada es sincero y ya lo ha hecho antes en innumerables ocasiones. Barbón sabe que si él quiere el PP se puede sentar a negociar. Es muy bueno que el partido del Gobierno y el principal partido de la oposición se sienten a hablar para aligerar la carga de todo lo que estamos viviendo a la gente.

-¿Cree posible un pacto sobre el Presupuesto o van a poner líneas rojas, como exigir ya una rebaja de impuestos?

-Ni nos vamos a vender barato ni nos vamos a negar a hablar con el Gobierno. Queremos esperar al borrador para trasladar nuestros planteamientos. Pero estamos muy preocupados. Es incomprensible que el Gobierno no haya llevado a la Junta desde marzo una modificación del Presupuesto, para adaptarlo a la nueva situación del covid-19, que no podía contemplarse cuando se aprobó a finales del año pasado. Nos preocupa mucho la situación de la industria y también la sanidad, las residencia y la falta de coordinación con los ayuntamientos, a los que hay que ayudar para que no entren en quiebra o tengan que gastar sus remanentes para afrontar los costes inmensos derivados del covid-19.

-Usted es ingeniero y ha trabajado fuera de Asturias. ¿Qué necesita la industria regional para tener futuro?

-No entiendo que el consejero de Industria no esté camino de Madrid a diario para conseguir el Estatuto de las Electrointensivas y para pelear por los fondos de transición. Asturias tiene que definir las líneas estratégicas de su industria. Nuestras empresas necesitan aumentar de tamaño, profundizar en su internacionalización y que se les eliminen las trabas burocráticas e impositivas, como el precio de la luz. La industria pesada, de la que dependen miles de empleos, un Gobierno regional que meta presión y sea beligerante en Madrid. Y como dice Teresa Mallada no vemos por ningún lado la supuesta influencia de Barbón en el Gobierno central. No sabemos si es que no la tiene o que no la ejerce para no molestar a sus compañeros de partido y a sus superiores.

-¿Por ejemplo a Adriana Lastra?

-Me hago pocas ilusiones con lo que pueda hacer Adriana Lastra.

-¿Y eso?

-No creo que sea la mejor portavoz y representante que podamos tener los asturianos en Madrid.

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