“Gobernar no es prohibir”, espetó la portavoz de Ciudadanos, Susana Fernández, a Adrián Barbón después de tachar de “clamorosas” la falta de precisión y la inseguridad jurídica en algunas medidas decretadas por el Gobierno asturiano, como los cierres perimetrales de Oviedo, Gijón y Avilés. En su turno de respuesta, Adrián Barbón dejó entrever la receptividad a ampliar los límites de ese confinamiento del núcleo urbano al concejo, una decisión que se adoptará en el Consejo de Gobierno de esta semana. Y preguntó a su interlocutora “si las limitaciones de Merkel, Macron o Igea son poco democráticas”.
En su intervención, Susana Fernández empezó calificando de “autocomplaciente” el discurso del jefe del Ejecutivo autonómico, tanto en el debate de orientación política de Asturias como en los realizados en los últimos meses, pero apostó por la necesidad de un diálogo que resulte fructífero y garantizó que “en la negociación de ayudas a autónomos y a los colectivos más perjudicados nos van a encontrar”.
La diputada del grupo naranja responsabilizó a Barbón de “improvisar” en dos de los frentes sacudidos por la pandemia, como la sanidad y la educación. “No hay enfermeras ni para cubrir vacaciones. Están doblando, se quejan de mala organización y de falta de previsión”, esgrimió Susana Fernández, que reclamó la necesidad de “un estudio de demografía laboral en la sanidad regional”, en referencia al personal que tiene próxima su jubilación. Vaticinó que “los momentos más difíciles están aun por llegar”.
Ciudadanos también apuntó en el “debe” del Gobierno socialista la situación de la industria asturiana. “Haga que le escuchen más y no se escuche tanto”, recomendó Susana Fernández, que al inicio de su intervención asumió su inexperiencia en este tipo de debates. La diputada del grupo parlamentario naranja recogió también el guante de la negociación para una estrategia regional para los fondos europeos: “Suponen una nueva oportunidad, quizá la última para Asturias”, subrayó Susana Fernández, que lanzó un mensaje nítido sobre la oficialidad del asturiano: “¿Con la que está cayendo, le parece de verdad una prioridad? Es un gasto innecesario y extemporáneo. Para este tema no cuente con nosotros”, avisó la portavoz de Ciudadanos.
El presidente del Principado se quedó con la disposición del grupo naranja al que señaló como “fundamental” para el diálogo en el seno del parlamento y agradeció “el tono” de Susana Fernández, una valoración que contrastó vivamente con la que había dado instantes antes a la portavoz del PP, Teresa Mallada.
Aunque el intercambio con la portavoz del grupo naranja resultó bastante amistoso, sobre todo en las formas, el presidente del Principado no se resistió a lanzar una puya a Ciudadanos cuanto el debate llegaba a su fin y pasó factura por la polémica votación del Presupuesto para 2020. “Permítanme una maldad: ¿No pasará lo mismo que la vez anterior? Teníamos un pacto para que se abstuvieran y una llamada desde Madrid cambió su voto”, recordó Barbón.
