La marejada de ayer causó daños en varias embarcaciones atracadas en los puertos de Candas y Puerto de Vega. En el primero, al menos cinco lanchas fueron “a pique” de madrugada, según detalla el presidente del club náutico Cuatro Vientos, Julián Soriano. El fuerte oleaje que batió las costas asturianas durante la noche se sumó a que las características del muelle candasín permiten que se cree oleaje dentro del puerto, lo que supone un peligro extra para las embarcaciones. A ello hay que sumar la falta de calado en la zona portuaria, que está pendiente de que el Principado ordene su dragado, previsto para este mes de octubre. La falta de dragado sumado a la entrada del fuerte oleaje en el puerto crea una situación de peligrosidad en el muelle local que los dueños de las embarcaciones de recreo esperan que no se vuelva a repetir. En Puerto de Vega, los destrozos se registraron de madrugada en la explanada del puerto y en la zona de atraque. La peor parte se la llevó una embarcación del puerto que gracias al trabajo de varios marineros pudo desplazarse a otra zona de atraque.