"¿Está descartado el confinamiento domiciliario que pide Asturias?" Fue la pregunta que le hicieron a Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias, en su rueda de prensa habitual de de los lunes. Y Simón tuvo que reseñar que "descartar no se descarta ninguna medida que pueda ayudar a controlar la expansión de la pandemia". Dicho lo cual, hiló una serie de razonamientos por los que considera que la voluntad del gobierno asturiano se ha adelantado demasiado en el tiempo.

"Las medidas tiene sentido aplicarlas en un momento u otro. Ahora tenemos un estado de alarma decretado hace solo unos días y que da una estabilidad" para encarar lo que vaya ocurriendo, comentó el director del Centro de Alertas. Para Simón, ese estado de alarma decretado por el Gobierno de España "da un margen de actuación a las comunidades autónomas" y no todas las actuaciones previstas están implantadas.

Para Simón hay que "dar margen" a las medidas, según se vayan adoptando, para que demuestren su eficacia. Y en el caso de Asturias, están en marcha cierres perimetrales de ciudades, de la propia región, adelanto del toque de queda y otras restricciones de movilidad que aún deben demostrar si tienen efecto en el control de la pandemia.

"Hay que ser comedido, no podemos poner todas las medidas en marcha cuando la situación no lo requiere porque no hay más", añadió de forma contundente. Para el responsable del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias, aplicar ahora un confinamiento domiciliario "cuando todavía no tenemos la seguridad de que sea el momento adecuado" tiene un riesgo. Tanto como llegar tarde a esas necesidades. "Tampoco podemos retrasarlas", reconoció Simón, reconociendo la dificultad de encontrar el momento justo. En todo caso, insistió en que "hay mucho trabajo que hacer con lo que nos aporta el decreto del estado de alarma", de ahí que quizá Asturias haya puesto por delante el temor del Gobierno regional a la situación que se vive.