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La segunda ola del virus cesará antes de Navidades, según los pronósticos

Por cada grado menos podría haber cinco infectados más al día, afirma el matemático Juan Luis Fernández

Luces de Navidad en Gijón.

El catedrático de Matemáticas de la Universidad de Oviedo, Juan Luis Fernández, calcula que la segunda oleada de coronavirus habrá cesado en Asturias antes de las Navidades. Sus pronósticos, publicados en octubre por LA NUEVA ESPAÑA, se están cumpliendo, por adelantado: la segunda ola del covid-19 debía llegar a su máximo durante esta semana, hasta el 5 de noviembre, y rondaría los 500 contagios diarios, como así ha sido. El último registro de casos, el de ayer, con 194 nuevos infectados, una cifra notablemente inferior a la de los días precedentes, parece indicar, según Juan Luis Fernández, que la curva ha entrado en fase de descenso, aunque habrá que esperar a los datos de hoy y de sucesivos días para dar esa tendencia por confirmada.

“En las Navidades vamos a tener una situación de bajo contagio, y luego vendrá una tercera ola. Vamos a tener que adaptarnos a eso. Ir absorbiendo las olas que vayan sucediéndose y cuidar de que no afecten a las personas más vulnerables”, afirma.

En esta segunda oleada de covid, Fernández estima que se infectarán entre 15.000 y 18.000 asturianos. Cree, después de hacer sus cálculos, que podría estar controlada en un mes, en el mejor de los casos y si sigue la tendencia a la baja del número de nuevos contagios de estos dos últimos días, a principios de diciembre, o en 54 días, a lo sumo, a las puertas de Navidad. El número de afectados y su duración dependerá de las restricciones que se adopten. “Si se aplican medidas confinatorias igual nos quedamos en 15.000”, indica. “Lo que estamos viendo ahora es el pasado y lo que ocurra en 14 días será el fruto de las medidas que tomemos hoy”, afirma.

Puente del Pilar

El matemático asturiano habla de un rebrote en medio de la segunda ola de la epidemia, que es en el que estamos inmersos y que se inició entre el 12 y el 17 de octubre, en el puente festivo del Pilar y con Oviedo celebrando el Desarme. La mayor movilidad, las reuniones, incluso los turistas que llegaron a la región en aquellos días pueden estar detrás del incremento de los contagios. “Infecciones va a haber mientras el virus esté circulando, la cuestión es qué numero de infectados puede tolerar la región sin tensionar el sistema sanitario y permitiendo que la economía siga funcionando”, reflexiona Juan Luis Fernández.

Ahora hay otra variable a tener en cuenta y es el frío. “El virus es muy sensible a la temperatura mínima”, señala el matemático. Una bajada de un grado por millón de habitantes supone ocho afectados más diariamente por covid-19. “Los núcleos principales de Asturias aglomeran unos 800.000 habitantes, si tenemos seis contagiados más por cada grado de menos, con una bajada de 10 grados, en una región hiperconectada en el centro como la nuestra, tenemos en torno a 50 personas más contagiadas. Eso es lo que va a ocurrir en los meses fríos, en enero, febrero y marzo”, explica.

Esas estimaciones forman parte de un estudio que Juan Luis Fernández va a publicar con el estudiante del master de Ingeniería en Telecomunicaciones José María Loché.

De todos modos, Juan Luis Fernández considera que “las cifras por sí solas no avalan el confinamiento domiciliario, aunque desconozco la situación sanitaria. Esto no solo se resuelve encerrando a la gente sino también poniendo más medios sanitarios. Hay que ser creativos y tomar medidas, de contratación y de investigación aplicada”. El matemático opina que las autoridades regionales debería “haber tenido prudencia” cuando la epidemia parecía estar controlada en Asturias, y haber aprovechado mejor el tiempo.

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