Las protestas en la calle de los sectores empresariales más afectados por los ceses de actividad -ordenados por el Gobierno asturiano para frenar la pandemia- han llegado a los despacho y las Cámaras de Comercio de Asturias se han hecho eco de ellas. Los portavoces de las tres instituciones empresariales asturianas han hecho frente común para pedir al Gobierno de Barbón que reflexione sobre si no sería mejor adoptar medidas "quirúrgicas, selectivas y proporcionadas", usando los medios tecnológicos, "y que se evalúen los distintos escenarios de daños".
La petición de las Cámaras pasa por reivindicar que se acompase "la protección de la salud pública con la debida protección de una necesaria salud económica, empresarial y laboral" ya que su percepción es de que "la sociedad está perpleja, desconcertada, desorientada, cargada de incertidumbre sobre su futuro cercano, pero también sobre los horizontes a medio y largo plazo".
Frente a las tesis siempre destacadas por Adrián Barbón de que sin salud no hay economía posible, las Cámaras de Comercio reseñan que "en el largo plazo, sólo una economía fuerte es capaz de sostener el bienestar y la cohesión social y por ende un buen sistema de salud pública".
El comunicado hecho público por las Cámaras pone de manifiesto que, sin ser expertos en materia de salud pública "sí conocemos y padecemos las graves consecuencias económicas y sociales de esas medidas" que se han tomado en Asturias, como el adelanto del toque de queda o el cierre de todo el comercio minorista salvo excepciones. Reclaman desde las instituciones empresariales que si se limita el desarrollo de actividades económicas y empresariales "se escuche antes a los representantes de los colectivos afectados, para paliar sus efectos negativos", así como urgen que se apliquen "medidas solidarias de apoyo" que minoricen los efectos adversos.
