Pendientes de la pandemia y de si su evolución permitirá celebrar de una vez por todas las elecciones al Rectorado. Así formalizaron ayer sus candidaturas los dos aspirantes a llevar el bastón de mando de la Universidad de Oviedo durante los próximos cuatro años: Santiago García Granda e Ignacio Villaverde Menéndez. Lo hicieron con una hora de diferencia en el registro de la institución académica asturiana. El primero en llegar fue el actual rector y catedrático de Química Física, quien defendió que su mandato ha supuesto un “período de calma y sosiego” a la Universidad. Tras él, fue el turno del catedrático de Derecho Constitucional y ex vicerrector de Relaciones Institucionales en la etapa de Juan Vázquez, cuyo proyecto pretende convertir a la Universidad en una “gran factoría de ideas” y devolverle la “ilusión”.

García Granda y Villaverde se enfrentarán en las urnas el próximo 1 de diciembre si la crisis sanitaria lo permite. El covid ya obligó a retrasar las elecciones en marzo y parece que ahora vuelven a correr peligro. La Junta Electoral se pronunciará esta semana. Santiago García Granda, no obstante, verbalizó ayer sus dudas. Dijo que la posibilidad de que se tengan que aplazar nuevamente los comicios “está muy presente” y que las elecciones se verían “muy condicionadas” si hay un nuevo confinamiento. De momento, esta última medida no está encima de la mesa, tras rechazarla ayer otra vez el Ministerio de Sanidad. Villaverde, en cambio, quiere votaciones y teme que su contrincante “utilice” la situación sanitaria para retrasar los comicios. El constitucionalista celebrará hoy una rueda de prensa, en versión presencial y telemática, para avanzar su programa electoral.

El plazo de registro de candidaturas empezaba ayer y termina hoy. Sin embargo, los dos aspirantes al Rectorado decidieron hacerlo ayer. El primero fue, a las 11 horas, Santiago García Granda, que acudió acompañado por la secretaria general de la Universidad, Eva María Cordero. El actual rector en funciones dijo afrontar los comicios con más ilusión todavía que hace cuatro años, cuando venció a José Muñiz, Pedro Sánchez Lazo y Agustín Costa, y con la sensación de tener los deberes hechos. “El equipo de gobierno presenta esta candidatura con más ilusión que en 2016 y con el trabajo hecho porque hay un porcentaje muy elevado de promesas cumplidas”, subrayó. Según Granda, su mandato ha dado un “periodo de calma y sosiego” a los campus, ya que “no ha habido conflictos”, y se comprometió a concluir los retos iniciados. Como ejemplo puso el relevo generacional y la estabilización del profesorado.

Por su parte, Ignacio Villaverde formalizó su candidatura a las 12 horas, junto a Humberto Rodríguez Solla, su jefe de campaña. “Encaro las elecciones con ánimo fuerte y ganador y con la absoluta convicción de que la Universidad apostará por el cambio que necesitamos para afrontar los desafíos de los próximos años”, afirmó. El catedrático de Derecho Constitucional destacó que pretende “ilusionar” a la comunidad con un “proyecto sólido y de cambio”. Asimismo, quiere convertir a la institución en una “gran fábrica de ideas para dejar de ser esta especie de academia de formación profesional en el que nos ha convertido el actual equipo rectoral”. Villaverde avanzó tres medidas de su proyecto: “Reorganizarnos para dar respuesta a los problemas; un plan de rejuvenecimiento, no solo de profesores e investigadores, sino también del PAS; y un cambio de estructura presupuestaria para saber gastar mejor”.