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Pablo Fernández Muñiz | Consejero de Salud del Principado

“Sería horrible tener que seleccionar entre pacientes por falta de plazas de UCI”

“Espero que lo peor sea lo que estamos pasando ahora, y que la incidencia empiece a disminuir”

Pablo Ignacio Fernández Muñiz.

Pocas horas después de conocerse, ayer, los datos del peor día de la pandemia de coronavirus en Asturias, el consejero de Salud del Principado, Pablo Ignacio Fernández Muñiz, atiende desde su despacho a LA NUEVA ESPAÑA por vía telemática. El cirujano avilesino (1966) se muestra muy preocupado por los tremendos zarpazos del covid en la región, pero quiere ver luz al final del túnel. “Esperemos que lo peor sea lo que estamos pasando ahora, y que la incidencia empiece a disminuir”, subraya.

–Hoy [por ayer] hemos sumado 581 casos nuevos de coronavirus. ¿Ha faltado anticipación?

–No. Los epidemiólogos nos estaban advirtiendo de que había que hacer algo más porque, para ellos, era muy evidente que estábamos en una situación muy grave y había que actuar con mucha contundencia. De ahí las últimas medidas que pusimos en marcha.

–¿Cómo se explica lo que está sucediendo?

–Podemos decir que es similar a lo que pasa en los países de nuestro entorno con una dinámica epidémica parecida, como Francia, Reino Unido, Dinamarca, Suiza... En Asturias también conseguimos en los últimos meses una curva epidémica más bien plana que ahora ha tenido un crecimiento vertiginoso.

–¿Por qué?

–Eso es lo que yo pregunto a los epidemiólogos. Me dicen que en todos los países se están haciendo esa pregunta. Hay algunas hipótesis, pero todavía no conocemos al virus lo suficiente como para explicarlo. No tenemos una causa cierta.

–¿A dónde vamos a llegar en cuánto a cifras? Un día decimos que la cifra de casos nuevos es dramática, y al día siguiente crece en varias decenas.

–No lo sabemos. Uno de los grandes problemas de la gestión de la pandemia, tanto para los responsables de la gestión como para el ciudadano, es la incertidumbre. Cuando te enfrentas a algo nuevo o desconocido, la incertidumbre está ahí. Y lo correcto es responder con prudencia. A algunos nuestra respuesta les parece demasiado contundente, pero no puede ser de otra manera. A veces trabajamos con una anticipación que algunos no entienden, porque no creen que vaya a venir una situación demasiado adversa, pero ante la duda hay que actuar de ese modo.

–Es un poco desesperante, ¿no?

–Estamos viendo comunidades autónomas que, después de haber subido mucho, han conseguido bajar y tienen una situación más favorable. Eso nos da una esperanza de que se puede. ¿El objetivo? Empezar a bajar sin llegar a subir tanto como han subido otras comunidades.

–¿A dónde vamos a llegar?

–Esperemos que lo peor sea lo que estamos pasando ahora. Las medidas que hemos puesto en marcha, que son muy duras, son para que lo peor sea esto y empiece a disminuir.

–A mucha gente le cuesta entender que Asturias haya estado 25 días sin casos y de golpe tengamos una mortalidad más importante que la de Madrid. ¿Cómo podemos entender ese vuelco tan negativo?

–Es lo que comentaba. Nuestra curva epidémica se parece mucho a la de algunos países de Europa. Otras comunidades están ahora mismo en una tendencia mejor, pero hace unas semanas estaban en una situación a la que esperamos no llegar. Nosotros tenemos un crecimiento más tardío, hemos conseguido retrasarlo, pero si alguien creía que ese aumento se podía impedir, ese no era un objetivo realista. Siempre dijimos que esto no estaba solucionado. Hasta que tengamos una vacuna y un antiviral eficaz esto no lo puedes dar por terminado.

–¿Por qué tenemos la tasa más alta de toda España de ingresos en UCI con relación a la población?

–Asturias es una comunidad autónoma mucho más envejecida que el resto de España. Entre nosotros vive gente de más edad en una proporción más alta que en la mayor parte del país. Con la misma incidencia, este virus está afectando a más gente mayor y también a más gente con enfermedades crónicas respiratorias. También se están viendo los efectos de la contaminación ambiental, que te hace más propenso a las enfermedades respiratorias. Además, en Asturias se da otra circunstancia: independientemente de la edad de las personas afectadas y de que vivan en su domicilio, en una residencia o donde sea, toda persona que necesita un hospital es trasladada a un hospital. Y toda persona que necesita cuidados intensivos es trasladada a cuidados intensivos.

–¿Quizá en otros sitios no sucede esto, quiere decir?

–Nuestro criterio es ese y es compartido por todos. Nadie lo pone en duda.

–Las residencias vuelven a dar unas cifras tremendas de infectados y muertos. ¿Qué falla? ¿Por qué las privadas van peor?

–No sabría decir qué está fallando. Si es cierto que ahora las que tienen más casos son las del ámbito privado. Sabemos que el virus no se genera dentro de una residencia, sino que entra desde fuera, a veces por los profesionales, porque por mucho cuidado que se tenga es muy difícil evitarlo. O por las visitas. Hay protocolos para reducir ese riesgo, pero el riesgo cero es imposible. Podemos revisar y fortalecer los protocolos, y ya estamos haciéndolo, para ayudar a esas residencias.

¿Teme un colapso de todo el sistema sanitario?

–Mi deber es evitarlo. En estos meses hemos trabajado en fortalecerlo. Hemos incorporado muchos respiradores y, con ello, la capacidad de cuidados críticos. Ahora tenemos 1.700 profesionales más que hace un año. También más material de protección individual.

–¿Se imagina tener que seleccionar qué enfermos ingresan en UCI y cuáles han de ser excluidos por falta de capacidad?

–Sería horrible. En algunos sitios llegaron a ello. Esperemos no tener que llegar. No obstante, para los profesionales sanitarios tampoco sería una situación completamente nueva el tener que adecuar los arsenales terapéuticos disponibles.

–¿Ve muy cansados a los profesionales sanitarios?

–Los veo con una tensión muy alta y un estrés máximos y, sobre todo, durante demasiado tiempo. Para ellos ha habido muy poca tregua entre una ola y otra. Y, después, la incertidumbre mina mucho la moral.

-¿Qué ha pasado en Gijón? Resulta evidente que ha sido el punto de eclosión de la pandemia.

–No, no es Gijón. Gijón tiene más presión que otras ciudades, pero en este momento Asturias entera está a un nivel máximo, por encima de 250 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días. Es un problema general. Que sea mayor en Gijón no quiere decir que el problema sea solo en Gijón.

–Pero está claro que el Hospital de Cabueñes está totalmente saturado desde hace varias semanas, que ha derivado muchos pacientes y que eso ha repercutido sobre el resto de la red sanitaria.

–La incidencia de Gijón es mayor que la de otros lugares, y en Cabueñes tienen que notarlo más que en otros sitios, obviamente. En Asturias tenemos un sistema sanitario bueno y que funciona en red, como hemos hecho en este caso. Hay enfermos que no han sido atendidos en su hospital, es algo bastante habitual.

–¿Se cesará al gerente de Cabueñes, como piden los sindicatos?

–Le voy a corregir: lo pide un sindicato. La junta de personal se ha mostrado en contra de lo que pide la CSI.

–En todo caso, ¿habrá cambio de gerente en Cabueñes?

–Nadie está planteándose nada. Que un sindicato haga una petición no significa que tenga la razón. Ni siquiera el resto de sindicatos le dan la razón.

-El Ministerio de Sanidad ha negado a su Departamento el confinamiento domiciliario en Asturias. ¿Comprende las razones del ministro Salvador Illa y de Fernando Simón?

–Entiendo sus razones. Tienen una visión global. Pero estoy convencido de que para Asturias lo mejor es lo que plantea mi equipo.

–¿Se baraja el cierre de más concejos?

–Nuestros técnicos consideran que el cierre de los tres concejos más poblados, Oviedo, Gijón y Avilés, era la medida necesaria y la hemos prorrogado hasta el día 18. En este momento no está planteándose ningún otro cierre de otros municipios.

–¿Permitirán reabrir al pequeño comercio?

–Si la situación mejorase, podría ser uno de los sectores que antes abriera. Las medidas están puestas para un plazo de quince días. Si viéramos otras opciones, las valoraríamos. Se miran muchos factores. Todos buscamos lo mejor para todos.

–¿En qué medida se disparará el gasto sanitario?

–El gasto sanitario es muy grande, pero la situación lo exige. En Asturias, nadie está escatimando en medios.

–¿Cuándo se abrirá el hospital de campaña de la Feria de Muestras de Gijón?

-A principios de la semana que viene estará disponible. Entrará en servicio en cuanto haga falta.

-¿Qué pasará cuando llegue la gripe?

–Es muy importante que intentemos minimizarla. Estamos haciendo un esfuerzo importante en cuanto a vacunación. Se han vacunado más del doble de personas que el año pasado en estas mismas fechas. Entre los profesionales sanitarios ha aumentado la proporción de vacunaciones de una manera enorme.

–¿Piensa que será posible salvar la campaña de Navidad?

–Tenemos una gran preocupación de que no sea una Navidad normal. Ojalá estemos en una situación muy buena, pero si estamos como ahora tendremos que cenar solo los convivientes, y sería un poco triste. Pero lo peor es que va a faltar gente en todas las familias.

–¿Le agrada ese plan contra la desinformación y las mentiras en los medios de comunicación que prepara el Gobierno central?

–No estoy al tanto. No me atrevo a opinar.

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