La Fiscalía del Principado de Asturias solicita hasta cinco años de prisión, alejamiento y prohibición de residir en la misma población que la víctima, entre otras penas y medidas, para el octogenario Aurelio Ll. I., por acuchillar dos veces a su expareja en el domicilio de esta en Pola de Siero, en el verano de 2019. El escrito de acusación de la Fiscalía ya ha sido presentado en el Juzgado encargado del procedimiento, el de instrucción número 3 de Siero. Ahora corresponde a la defensa y a la acusación particular presentar sus correspondientes escritos contra el acusado. En breve, este asunto pasará a un Juzgado de lo penal, donde el acusado será juzgado.

El ministerio fiscal sostiene que el acusado mantuvo una relación sentimental durante aproximadamente nueve meses con la víctima, desde finales del año 2018. La relación se fue deteriorando debido al carácter celoso y controlador del acusado, hasta el punto de que la mujer, de unos 70 años, trató de ponerle fin en alguna ocasión, si bien el acusado lograba siempre convencerla para que continuaran juntos, sin que finalizase la relación.

En esta situación, en hora no determinada de la mañana del 14 de agosto de 2019, cuando ella regresaba a su vivienda, en Pola de Siero, se encontró con el acusado, que la estaba esperando en el portal y que comenzó a recriminarle que no hubieran salido juntos. Este era un motivo frecuente de discusión entre ambos, debido a los celos obsesivos del acusado, por lo que la mujer le comunicó su intención de poner fin a la relación.

Ya en el interior de la vivienda, ella se fue al salón a revisar la correspondencia, y, cuando se hallaba totalmente abstraída, el acusado, tras coger un cuchillo de cocina de 13 centímetros de hoja, se lo clavó por la espalda de forma repentina y sorpresiva, sin que la mujer pudiera advertir ni defenderse del ataque. La agresión hizo que la mujer cayera hacia atrás en el sofá, siempre sin posibilidad de defensa, momento en que el acusado le asestó otra cuchillada, la segunda. A continuación, la tiró al suelo y le colocó una rodilla en el cuello, a la vez que le decía: “Si no eres para mí, no eres para nadie”. La mujer consiguió decirle que solo le quería a él, que le quería más ella que él, puesto que la “estaba matando”. En ese momento, al darse cuenta de lo que estaba haciendo, el acusado soltó el cuchillo. Ella, tras recoger el arma, logró salir de la casa y acudir a la Comisaría a pedir ayuda.

A consecuencia de esta agresión, la mujer sufrió lesiones de las que tardó en curar hasta 48 días. Le quedaron como secuelas varias cicatrices en el cuerpo. La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de lesiones con las circunstancias agravantes de parentesco, alevosía y desprecio de género, motivo por el que se solicitan hasta cinco años de prisión.

Libertad vigilada

Solicita además que se condene al acusado a 5 años de prisión, prohibición de aproximarse a la víctima a menos de 500 metros durante 7 años, a su domicilio, lugar de trabajo o cualquier lugar donde se encuentre y la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio durante el mismo periodo de tiempo y medida de libertad vigilada durante cinco años, debiendo estar localizable mediante aparatos electrónicos y no pudiendo residir en la población donde vive la víctima. Aparte solicita 15.000 euros de indemnización para la víctima, y debe resarcir, siempre según la Fiscalía, al Servicio Médico Urgente (SUMA) por la atención recibida. El hombre ingresó en prisión después de declarar ante el Juzgado que instruyó las diligencias.