La familia y allegados de Virgilio García, el operario de carreteras que resultó sepultado por una avalancha de nieve el día de Año Nuevo en Rioturbio –en la subida al puerto San Isidro–, se plantea buscar más alternativas a los drones facilitados por la empresa GAM en un intento de agilizar la búsqueda la próxima semana.
Francisco González, íntimo amigo y compañero del hijo del trabajador desaparecido, explicó ayer que el viernes se realizaron las labores necesarias para crear un ortomapa, una especie de mapa en 3D que se carga en el dron para que realice el vuelo. Y la idea es que durante este fin de semana, en el que la borrasca “Filomena” obligó a suspender las labores de búsqueda, se realizará la integración del georradar con el dron. Esto permitiría que el lunes se pudieran hacer las pruebas de campo con nieve real para comprobar si el reconocimiento del terreno es óptimo, de tal manera que el martes por la mañana, cuando las previsiones meteorológicas ya son mejores, se pudiera iniciar la búsqueda de Virgilio García.
“En realidad se trata de acotar el terreno para buscar”, explicó Francisco González. El georradar actúa sobre una superficie de unos 200 metros de largo por unos tres o cuatro de ancho. “Permite descartar zonas de búsqueda y facilitar la labor a los equipos de rescate. Lo que intentamos es que la tecnología ayude todo lo posible”, añadió antes de repetir emocionado palabras de “agradecimiento y admiración hacia las personas que con entrega y profesionalidad se están volcando para encontrar a Virgilio”.
Las condiciones a las que se enfrentan son muy difíciles. El jefe de la Sección Especial de Rescate e Intervención en Montaña (Sereim) de Cangas de Onís, el teniente de la Guardia Civil Pablo Villabrille, señaló que mañana, lunes, está previsto volver a realizar nuevas inspecciones desde el helicóptero para comprobar la zona tras el paso de la borrasca “Filomena”.
Otra cosa es poder bajar al terreno, lo que de momento se descarta “porque el riesgo de aludes es inasumible. En una escala de 0 a 5, en unas áreas es de 5 y en otras es extremo. La zona de búsqueda no es técnicamente compleja, pero en cualquier momento se puede producir lo que se denomina ‘el disparo’ y las posibilidades de salir si caen cientos de toneladas de nieve son muy pocas o ninguna”, explicó el teniente Villabrille.
Se calcula que tras las avalanchas de los días anteriores más la nieve caída durante estos días por la borrasca “Filomena”, el espesor pueda alcanzar hasta los 6 metros en algunas zonas.
