La comisión de crisis anticovid del Ejecutivo regional tiene previsto reunirse hoy para analizar los primeros datos obtenidos sobre la pandemia tras las fiestas navideñas, y decidir si se adoptan medidas más restrictivas teniendo en cuenta el incremento del número de casos que se han registrado en los últimos días y el avance de la incidencia del virus. Lo que es seguro es que el Principado volverá a implantar el toque de queda a las 22.00 horas, tal y como adelantó este diario. Esta misma mañana, el presidente del Principado ha confirmado esta medida en una entrevista radiofónica en RTPA, sin que haya trascendido si se van a adoptar más medidas para la hostelería.
La expansión del covid-19 en Asturias muestra, de momento, un crecimiento contenido. Salud comunicó ayer 153 nuevos positivos y 250 personas hospitalizadas. Según algunas fuentes, se ha confirmado un brote en Llanes con cinco positivos y unos 25 contactos estrechos.
Pero los casos siguen siendo “muy preocupantes” entre los mayores de 65 años. De hecho, el Principado hizo ayer hincapié en que Asturias se encuentra en el máximo nivel de alerta (nivel 4) en incidencia acumulada a siete días en ese grupo de edad. “El aumento de este indicador supone una situación de alto riesgo por tratarse del grupo de personas donde la afectación de la enfermedad puede ser más grave, lo que conlleva también un incremento en la presión asistencial. La situación es, por tanto, muy preocupante”, señaló el Ejecutivo regional.
Un dato relevante sobre el avance de los contagios es el que ofrece la tasa de positividad. El Servicio de Salud del Principado (Sespa) realizó el sábado 2.658 pruebas de diagnóstico de infección activa por covid-19, y la tasa se situó en el 6,55 por ciento. Los epidemiólogos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) consideran que la expansión del virus es difícil de controlar superado el 5 por ciento.
