Los alcaldes de algunos de los grandes concejos de la región, potencialmente afectados por las restricciones anunciadas ayer, acogen la nueva situación con mayoritaria resignación, “respeto” y acatamiento.

En Avilés, uno de esos municipios que junto a Castrillón y Corvera muy probablemente serán los primeros en sufrir las nuevas restricciones, la Alcaldesa, Mariví Monteserín (PSOE), se dice convencida de que “el confinamiento general hubiese sido mejor”, pero pidió “de nuevo a toda la ciudadanía mucha responsabilidad, esto no acaba de pasar. Hay que asumirla con la máxima diligencia posible por parte de todos y todas. Es un esfuerzo necesario, aunque a todos nos cuesta”, añadió Monteserín, que lanzó un mensaje de apoyo a la hostelería. “Pedimos a este sector un esfuerzo más e intentaremos compensarlo. Sé que es muy duro, pero parece que no queda otra que hacer esto”, añadió.

Tanto el regidor en funciones de Castrillón, el socialista Javier González, como el alcalde de Corvera, Iván Fernández (PSOE), apoyan sin fisuras las medidas de Adrián Barbón, y ambos se comprometen a que se cumplan. “La salud está por encima de todo”, señaló González. “Pedimos a los vecinos comprensión y cooperación, queremos que pase el virus y ahora toca hacer lo que dicen los expertos”, indicó Fernández.

“Yo soy egoísta. Yo quiero lo mejor para Oviedo y Oviedo ha salido bastante bien parado porque nuestra situación es bastante buena”, dijo el alcalde de la capital, el popular Alfredo Canteli, que lo siente, dice, “por los que tienen limitaciones, pero bastante polémica tengo yo con lo mío como para entrar en controversia con otros municipios”. “Respeto las decisiones”, abunda, “y siempre digo que hay que respetar los temas sanitarios, pero que tampoco hay que olvidarse de la economía, del comercio y de la hostelería porque al final la gente lo puede pasar muy mal”.

El alcalde de Siero, Ángel García, “Cepi” (PSOE), afirmó que “tenemos que ser más fuertes que el virus y son necesarias las medidas para derrotarlo, y la regidora de Langreo, Carmen Arbesú (PSOE), aseguró que está en contacto con “los técnicos de la Consejería de Salud para valorar la situación del municipio. Son ellos los que tiene los datos y los conocimientos y quienes deciden qué hacer”. Comentó que “la mayor preocupación en estos momentos es la incidencia entre las personas mayores de 65 años, el colectivo más vulnerable, el que puede desarrollar síntomas más graves y precisar hospitalización. Se necesitan medidas para protegerlos”, señaló.

El alcalde de Mieres, Aníbal Vázquez (IU), considera por su parte “normal que la gente pueda sentir cierto cansancio tras casi un año de renuncias y sacrificios”, pero añade que “hay que ser responsables. Estamos ante una situación muy grave y hay que entender que este tipo de medidas son necesarias”.