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“Una noche de angustia” tras el segundo pinchazo

“A pesar de los dolores que padecí, sigo diciendo que hay que vacunarse”, cuenta una auxiliar asturiana que sufrió efectos secundarios

Vacunación.

La vacuna del covid, como otras, puede traer consigo efectos secundarios. Raquel Fernández Lozano, sanitaria del ERA de 30 años, cuenta en primera persona el sufrimiento que tuvo que pasar la noche del jueves al viernes tras haber recibido la segunda dosis de la inmunización. “Con la primera dosis tuve un poco de dolor de brazo y algo de dolor de cabeza, pero no duró nada. El jueves empezó igual, con dolores leves, pero por la noche fue a peor”, relata. Ya les habían advertido los profesionales que les vacunaron que con el paso de las horas podrían notar los primeros efectos secundarios, entre las 48 y 72 siguientes a la administración de la dosis. Y así fue.

La auxiliar de enfermería pasó la noche en vela por los continuos dolores. “Me empezó a doler muchísimo el brazo, continuamente. Casi no lo podía levantar, no lo podía tocar. No sabía ni cómo colocarlo para que no me doliera. También tenía mucho dolor muscular, como de huesos. Me pesaba todo el cuerpo, me temblaban las piernas. Ponía los brazos en jarra y los tenía que cambiar de postura porque me dolía”, describe. En definitiva, lo que ella misma admite que “fue una noche de angustia. Tenía frío, luego calor, como una persona cuando está con fiebre muy alta pero sin tener fiebre. Me quedé completamente desvelada, como cuando tienes insomnio. Estaba muy cansada pero no podía dormir. No sabía cómo ponerme, cómo quitar el dolor”, añade.

El ibuprofeno fue su salvavidas momentáneo para poder lidiar con los dolores, similares a los de una gripe muy fuerte, pero sin tener fiebre en ningún momento. “Con el ibuprofeno logré que calmara un poco el dolor del brazo pero cuando se pasaba el efecto volvía otra vez. Y el viernes estuve fatal, cansadísima y con dolores pero pude descansar por la tarde y luego ya me levanté mejor”, reconoce.

Estos efectos secundarios que padeció Fernández Lozano tras recibir la segunda dosis de la vacuna la agotaron, pero aún así no duda de que hizo lo correcto y anima a la gente a sumarse a la vacunación. “Esperemos que esto sirva de algo y que dure tiempo. Hay que vacunarse; si no estamos todos o una gran mayoría de la población vacunada, no será lo mismo. A pesar de los efectos secundarios que sufrí, recomiendo a la gente que se vacune porque, a la larga, se supone que esto va a funcionar”, argumenta. Al fin y al cabo, fue una mala noche “de angustia” para ella que podría suponer dar carpetazo “a muchas malas noches de otros”. Precisamente las autoridades sanitarias ya advirtieron de que la administración de las vacunas podría tener efectos secundarios en una pequeña parte de la población, como ocurre con otras profilaxis. Entre los más comunes están la fiebre, sensación de cansancio y dolor en la zona de administración de la dosis. En el caso de Fernández Lozano, padeció dos de estos tres efectos secundarios más usuales, como la sensación de cansancio y dolor en el brazo donde le administraron la segunda dosis. Aunque en un grado muy intenso. No obstante, los efectos secundarios de esta magnitud son una excepción y lo normal es pasarlos sin mayor problema.

Las familias de los mayores que viven en residencias en Asturias recibieron información sobre estos posibles efectos secundarios de las vacunas antes de su administración. En los ensayos realizados, los efectos adversos más frecuentes fueron las mialgias (38 por ciento), escalofríos (32 por ciento), artralgias (24 por ciento) y fiebre (14 por ciento), “siendo mayoritariamente de intensidad leve o moderada y desapareciendo en pocos días tras la vacunación”.

Claves

  • Efectos secundarios. Los efectos adversos más frecuentes en ensayos fueron las mialgias (38 por ciento), escalofríos (32 por ciento), artralgias (24 por ciento) y fiebre (14 por ciento).
  • Intensidad y duración de los efectos. Según la información que recibieron las familias de los mayores que viven en residencias en Asturias, los efectos adversos a las vacunas son “mayoritariamente de intensidad leve o moderada, desapareciendo en pocos días tras la vacunación”.
  • Dolor en el brazo y cansancio. La sanitaria del ERA sufrió gran dolor en el brazo donde le administraron la vacuna, enorme cansancio y escalofríos, pero en ningún momento tuvo fiebre alta.

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