La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Nuevo brote tras la segunda dosis de la vacuna: ahora en un geriátrico de Gijón

Seis focos en residencias suman 161 casos en una semana | Los expertos apuntan a que son contagios antes del plazo de inmunización

La doctora Sandra Charro, ayer, entrando al Sanatorio Marítimo de Gijón, con una ambulancia en la puerta para trasladar a residentes. | Ángel González

La residencia geriátrica de la parroquia de San Pedro de Gijón, en Cimadevilla, confirmó ayer un brote que afecta a 17 de sus 34 residentes y a otros cinco empleados. Es el segundo brote confirmado en la villa de Jovellanos, después de que se conociera el del Sanatorio Marítimo –para personas con discapacidad intelectual–, con 79 usuarios infectados y pendientes de las pruebas PCR otros 26 residentes, además de nueve trabajadores. Los epidemiólogos achacan ambos brotes a contagios en el periodo “ventana”, entre la inoculación de la segunda dosis y la inmunización, que se consigue entre 8 y 10 días después. Pero coinciden también en que “se deben investigar las causas”, porque si el motivo no es ese, “entonces es que puede haber algún defecto en el lote de las vacunas”, lo que hay que descartar.

El Principado contabilizó en la última semana seis brotes en residencias, con un total de 161 positivos.

Los residentes en el centro de San Pedro, en Cimadevilla, recibieron la segunda dosis de la vacuna el 19 de enero y los del Sanatorio Marítimo, el día 28. Según los expertos, si se echan las cuentas desde que se produjo la segunda inoculación y la aparición de los síntomas, “lo más probable es que se produjeran los contagios antes de lograr la inmunización”. En el caso de Cimadevilla, de hecho, los positivos llevaban días confirmados y ya se ha trasladado a centros sanitarios a todas las afectadas –todas son mujeres– salvo una, de 102 años, que está “completamente asintomática”, según explicó ayer Francisco Javier Cachán, director del centro.

La magnitud del brote en el Marítimo, por su parte, ha obligado a ingresar en Cabueñes o en el hospital de campaña de Gijón a diez residentes. Otros once han sido trasladados a un antiguo hotel de Corvera rehabilitado por el Principado. Algunas familias de los 26 residentes de la unidad de apoyos generalizados (los de mayor grado de discapacidad) lamentaron ayer “no tener noticias” sobre la evolución de sus seres queridos, aunque las novedades, de haberlas, se sabrán hoy, cuando se haga el cribado por PCR. Esta unidad puede haberse librado del brote. Según Marta García, madre de una usuaria del centro de actividades de día, el Sanatorio “informa bien y en cuanto puede” sobre los resultados de las pruebas.

A juicio de Mario Margolles, coordinador del Observatorio de Salud, no parece que el foco vaya a tener “consecuencias graves” por la baja edad media de los residentes. La médica Sandra Charro también declaró ayer que, “dentro de la desgracia que supone un brote”, ha sido “una suerte” que los afectados ya estuviesen vacunados.

Compartir el artículo

stats