Misterio por un kamikaze en la Autovía del Cantábrico. El 112 recibió ayer por la mañana la alerta de varios conductores que circulaban por la A-8 (autovía del Cantábrico) a la altura de Llanes. En las llamadas los testigos aseguraban haber visto a un conductor que habría conducido varios kilómetros en dirección contraria por la citada carretera. La Guardia Civil no lo dudó un momento y se desplazó a la zona: los avisos por la presencia de este tipo de conductores suelen generar gran alarma. Pero no encontraron nada de nada. Los testigos solo acertaron a decir que el que conducía iba al volante de un coche blanco. Poco más pudieron añadir. Ni siquiera se sabe si fue un conductor despistado que de pronto se dio cuenta de lo que sucedía y dio la vuelta. Afortunadamente, no hay constancia de que nadie resultara herido. Las llamadas de alerta se referían, según los datos que facilitaron desde la Guardia Civil, a la zona del kilómetro 291 de la A-8 y el supuesto kamikaze circulaba en sentido Galicia por los carriles contrarios.