Los contagios por covid-19 entre el personal sanitario y el sociosanitario se ha desplomado respecto de la primera ola de la pandemia declarada hace casi un año. Así, lo recoge el último informe sobre el tema realizado por el Observatorio de Salud de Asturias, en plena semana en que la comunidad sanitaria está de luto por el fallecimiento de Pablo Riesgo, un auxiliar de enfermería gijonés de 26 años que contrajo covid en noviembre y que, tras un restablecimiento que le permitió incorporarse a trabajar, falleció por causas que se investigan. Pero lo cierto es que la afectación de los sanitarios por la pandemia ha caído de forma sustancial: en esta ocasión -tercera ola- se han infectado el 4% de los profesionales, mientras que en la pasada primera ola lo hizo el 23,7 por ciento de la plantilla. Además, la gravedad también ha sido menor. Así, mientras en la primera ola fue hospitalizado el 9,5 por ciento de los contagiados, en las posteriores se quedó en el 4,3 por ciento, según el citado informe.

La segunda y la tercera ola se solaparon, pero los expertos sitúan la segunda ola en la semana del 6 al 13 de julio de 2020, y el inicio de la tercera entre el 4 y el 10 de enero.

Pero a la hora de analizar los datos, se tienen en cuenta también el inicio de las vacunaciones el 27 de diciembre. Así se indica que desde el 29 de diciembre hasta el 7 de febrero se notificaron 233 casos, de los que 71 trabajadores (30,5 por ciento) habían recibido ya la primera dosis de la vacuna (del 29 de diciembre al 22 de enero de 2021), y otros 11 (15,5 por ciento) también la segunda. Sin embargo, los positivos se declararon antes de que ninguno de ellos hubiera llegado a la inmunización completa. El resto de positivos se dio entre profesionales que aún no habían sido vacunados.

El informe del Observatorio de Salud del Principado también indica que desde el inicio de la tercera ola se han notificado 16 brotes que afectaron a 86 trabajadores y 339 residentes o pacientes. Cuatro de esos brotes se dieron en lo hospitales y el resto en centros sociosanitarios (residencias geriátricas).

La edad de las personas contagiadas también es significativa. El 61,9 por ciento de los casos confirmados tenían menos de 50 años. La mayoría (80,3 por ciento) eran mujeres, lo que se explica porque son mayoría en el ámbito sanitario y sociosanitario.