Tres años de prisión es la pena que solicia la Fiscalía para el acusado de un delito continuado de estafa, por ofrecer falsos contratos de alquiler para los meses de verano en Luanco y Gijón y quedarse con el dinero de la reserva. El procesado los anunciaba en internet e incluía fotografías, pero los pisos ni siquiera eran suyos. La vista oral está señalada mañana en el Juzgado de lo Penal número 1 de Oviedo.

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, en marzo de 2018 el acusado publicó un anuncio en una página especializada de Internet en el que ofrecía el alquiler para el verano de un piso en Luanco, por 800 euros al mes. Incluyó fotografías del inmueble para dar una mayor credibilidad. De esta forma, consiguió convencer a un "cliente" para que le realizase una transferencia de 500 euros como reserva del alquiler. El acusado se quedó con el dinero sin llegar a alquilar el piso.

Ese mismo mes, una mujer publicó un anuncio en la misma página de Internet porque buscaba un piso en alquiler para el verano en Luanco. Unos días después, el acusado se puso en contacto con ella, ofreciéndole el alquiler para el verano de un piso. La oferta que le hizo era para alquilar el mes de agosto y 10 días en septiembre a cambio de 1.500 euros, y le envió fotografías del inmueble. Finalmente, acordó con ella incluir también la segunda quincena del mes de julio por 2.000 euros. A través de ese procedimiento, consiguió convencerla para que le realizase una transferencia de 200 euros, como reserva del alquiler.

Unos meses después, en mayo, el acusado, usando el mismo procedimiento, ofreció el alquiler para el verano de un piso en Gijón, por 800 euros la quincena. Logró convencer a dos personas para que le realizasen una transferencia de 400 euros, también en concepto de reserva del alquiler. El acusado se quedó con el dinero sin alquilarles el piso, ya que ni era suyo ni tenía ninguna disponibilidad sobre él. Cuando los arrendatarios, residentes en Murcia, llegaron al inmueble se encontraron con que estaba habitado por los dueños legítimos y tuvieron que buscar un hotel para alojarse. El coste del alojamiento ascendió a 162 euros.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito continuado de estafa con la agravante de la responsabilidad criminal de reincidencia. Por eso solicita para el acusado una condena de 3 años de prisión y el abono de las costas. Además, en concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Público solicita que el acusado indemnice con un total de 3.124 euros a los estafados.