El flamante equipo rectoral de la Universidad de Oviedo trabaja en la redacción de un nuevo convenio con la Fundación Universidad, encargada de gestionar la colaboración entre la institución académica y el sector empresarial, una vez que el anterior expiró el pasado 28 diciembre sin que el Rectorado anterior lo hubiera renovado dentro del plazo. “Esta es la situación con la que se ha encontrado el nuevo equipo al inicio del mandato”, reseñó ayer en un comunicado la Universidad, que destaca que bajo la dirección de Santiago García Granda se ignoró que la fecha límite para prorrogar la anterior encomienda de gestión o formalizar una nueva terminó el 6 de febrero, sin realizar ningún movimiento al respecto.
El Rectorado que encabeza Ignacio Villaverde destaca que en las condiciones actuales la Fundación está inhabilitada para ejercer sus funciones al carecer de cobertura legal, y que mientras trabaja para “encontrar cuanto antes una solución y minimizar los contratiempos” será el Vicerrectorado de Investigación el que asuma de forma provisional la misión de la Fundación.
Por otro lado, el sindicato CC OO lamentó ayer las demoras del Principado en los plazos de tramitación y resolución de las becas predoctorales “Severo Ochoa”. Las llamadas “becas tortuga” vuelven a abocar a muchos trabajadores de la investigación a vivir “en la incertidumbre”, apunta la organización, que lamenta que “se debilita la investigación científico-tecnológica” en Asturias y se deja “a más de 150 personas a la espera de su contrato”.
