Al campo asturiano se le agota la paciencia. El nuevo retraso en la convocatoria de las ayudas de la Política Agrícola Comunitaria (PAC), que finalmente no ha salido publicada esta semana en el BOPA, según el compromiso asumido la pasada semana por el Consejero de Medio Rural, Alejandro Calvo, ahonda aún más la desesperación de los ganaderos (más de 9.000 reciben fondos en Asturias), pendientes de las ayudas para poder sostener las explotaciones.

Alejandro Calvo anunció la pasada semana, en una visita realizada a una ganadería de Colunga, que la convocatoria se publicará en el Boletín Oficial del Principado (BOPA) esta semana. Fuentes de la Consejería reconocieron ayer que la convocatoria será aprobada en el Consejo de Gobierno de la próxima semana, con lo cual la publicación en el BOPA y la consiguiente apertura del procedimiento aún se demorará más de una semana.

La PAC de 2021, dentro de un régimen transitorio que hace de puente entre el actual régimen de ayudas y el resultante de la última reforma, aplicable a partir de 2023, regará el campo con 96 millones de euros, 14 más que en 2020, destinados a ayudas agroambientales, agricultura ecológica, indemnización compensatoria de montaña y razas en peligro de extinción. Los subsidios conforman una parte esencial de la renta de las ganaderías asturianas, hasta llegar a una media del 30% de los ingresos.

Los ganaderos necesitan la apertura del proceso de solicitudes para presentar los documentos que, a su vez, sirven como aval ante las entidades bancarias para adelantar los pagos. Se trata de una práctica habitual entre los ganaderos que, de ese modo, reciben una importante inyección de liquidez en los primeros meses del año.

El Gobierno del Principado también ha incurrido en retrasos en el pago de las ayudas PAC solicitadas en la campaña 2020, lo que ha originado un agravio comparativo con respecto a otras comunidades autónomas que realizan antes la totalidad de los pagos. En convocatorias pasadas el ingreso de estas ayudas se había realizado en diciembre.

“No se puede permitir que los retrasos se deban a mala gestión o trámites burocráticos y solicitamos mayor celeridad en las gestiones necesarias para proceder al pago, los ganaderos están pendientes de recibir esos fondos para hacer frente a compromisos adquiridos en relación con esas ayudas, que además son fundamentales para paliar la delicada situación económica por la que atraviesan nuestros agricultores y ganaderos, agravada este año por el covid”, indica Ramón Artime, presidente de la organización ASAJA.

“Es una vergüenza lo que está pasando en Asturias; no podemos más”, indica la ganadera Mercedes Cruzado, secretaria general de COAG. “En todas las comunidades se ha abierto la convocatoria de las ayudas, menos en la nuestra; nos sentimos tratados de un modo injusto”, señala Cruzado, que no descarta convocar movilizaciones si las cosas no cambian. “Pensamos manifestarnos por el grave problema que tenemos con el lobo, pero vamos a tener que salir a la calle también para reclamar las ayudas”, indica la ganadera de Grandas de Salime.

La Consejería agotará las ampliaciones de plazo para realizar la convocatoria, que podrá estar vigente hasta el 31 de mayo. “Si tenemos en cuenta que ya estamos casi a mitad de abril, nos da la impresión de que iremos muy justos de tiempo”, señala Cruzado. “El discurso de la Consejería es estupendo, pero queremos hechos, las buenas palabras ya no nos sirven”, recalca la líder de COAG en Asturias.

Aunque las tramitaciones de la PAC se renuevan año a año, es frecuente que haya cambios en los datos relativos a las tierras gestionadas, cabezas de ganado o circunstancias familiares de los perceptores, lo que obliga a realizar cambios que siempre suelen llevar tramites farragosos.

El maná de los fondos europeos de la PAC para el campo español cojea en su forma de reparto, pero, a pesar de las deficiencias, estas ayudas comunitarias siguen siendo una inyección económica vital para las explotaciones agrarias.