Con un “cuánto tenemos que aprender de Galicia”, la presidenta del PP asturiano volvió a enarbolar la ley gallega de impulso demográfico, la primera iniciativa legislativa autonómica en la materia, como ejemplo y afrenta para el Gobierno del Principado. Teresa Mallada utilizó un acto sobre el desafío del declive poblacional compartido con la conselleira de Política Social de la Xunta, Fabiola García, para afear a Adrián Barbón su inacción. “En Asturias seguimos sin conocer ni una sola medida para evitar el despoblamiento”, le dijo a su compañera de partido.
Mallada tiró de inventario de agravios estadísticos y tras recordar que la autonomía vecina perdió “tres veces menos población que Asturias en 2019” caracterizó a esta región “con casi siete de cada diez jóvenes inactivos” como “el mayor solar laboral juvenil del país”. La líder de los populares asturianos valoró de la ley gallega que “integra la perspectiva demográfica en los presupuestos de manera transversal”, que “facilita la concesión de créditos a autónomos y empresas” o que contiene medidas “de apoyo a la familia o al emprendimiento”.
Fabiola García cuestionó en su turno la estrategia frente al despoblamiento recién presentada por el Gobierno central, con sus “medidas inconcretas” y su carencia de “mecanismos claros de financiación”, y subrayó en su ley la “tarjeta de bienvenida” de entre 1.200 y 2.400 euros por nacimiento, la gratuidad de las escuelas infantiles a partir del segundo hijo o la política de “impuestos cero en el rural”.
