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El testimonio de una docente asturiana olvidada en la vacunación "No sé a quién acudir"

"A día de hoy, como otra mucha gente, no solo seguimos esperando (¡qué vamos a hacerle!)... sino que no sabemos lo que la Administración ha anotado en nuestros expedientes. Ni a quién acudir (que no sea una maquina) para saberlo"

Vacuna

Son profesores olvidados por la Administración: llegaron a estar citados para vacunarse, pero con la cancelación de AstraZeneca nunca recibieron el pinchazo. María Isabel Álvarez Jiménez es una docente en un Centro de Secundaria. que ha escrito a la sección de Cartas al Director de LA NUEVA ESPAÑA que narra su odisea para poder ser vacunada.

Este es su testimonio:

"Soy docente en un Centro de Secundaria.

Ante la información de su diario este domingo, me gustaría exponer mi caso (que me consta no es único).

El día 1 de abril, en pleno Jueves Santo, me llega un mensaje para vacunarme del covid-19 el sábado 3. Ante la imposibilidad de consultar con mi médica de cabecera, me presento en el HUCA, en la zona que me toca, con mis informes, pues por problemas previos de salud necesito que se compruebe que no hay incompatibilidad alguna. Tras presentar dichos informes, y ante la falta de médicos que controlen la vacunación (a pesar de los cientos de personas que estábamos citadas), la enfermera me señala que por precaución no me la van a poner. Que acuda a mi médica y después me reprogramarán. Me informan también de que quedará allí anotado el motivo por el que no he sido vacunada.

Hasta aquí, todo bien. Analítica, revisión, no se ponen problemas... y ahí empieza el calvario.

Me dicen que soy yo quien debe llamar para reprogramar la cita (desde Atención Primaria no saben nada de las vacunas). El teléfono que dan para ello es una maquinita: no aciertas con el número, porque ninguno es adecuado a tu caso. Llamas a otro que circula por ahí para temas de covid, y sale otra maquinita. Aquí, tras teclear varios números, ¡sorpresa!: parece ser que yo he ido a vacunarme ¡y rehusé hacerlo! O eso dice la máquina.

Sigo intentándolo en el otro número, donde consigo hablar con una persona. Me dan otro número, esta vez del HUCA, de “citación para vacunaciones”. Respuesta literal: “Esta mañana, gestión del HUCA ha dado orden de que no se derive a nadie a esa extensión, y la han anulado”. Sorprendentemente, en el teléfono de atención desde el que me derivaron no sabían nada de esa decisión del HUCA, porque no fueron avisados.

Tras varias gestiones más, más de cinco llamadas a los dos números anteriores y algunos más, incluido el 112, y tras conseguir averiguar ¡que en el HUCA figuraba como ya vacunada!, consigo un correo electrónico, donde explico punto por punto todo lo ocurrido. Recibo respuesta al día siguiente, disculpándose por lo ocurrido, y señalándome que me volverían a citar. Cosa que hicieron para el lunes 12 de abril... y me anularon mediante llamada el domingo 11, porque por edad no me toca la AstraZeneca. Eso sí: quien me llama me pregunta si es que no he acudido el día 3, cuando estaba citada.

En fin, que a día de hoy, como otra mucha gente, no solo seguimos esperando (¡qué vamos a hacerle!)... sino que no sabemos lo que la Administración ha anotado en nuestros expedientes. Ni a quién acudir (que no sea una maquina) para saberlo.

Mientras tanto, la señora Consejera de Educación ha decidido que, tras la Semana Santa, el alumnado que antes estaba en casa media semana se reincorpore a los Institutos sea como sea. ¿Será casualidad que se haya incrementado el número de contagios entre la población de 15 a 25 años?"

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