César Román, conocido como el “rey del cachopo” y acusado de matar y descuartizar a su novia, Heidi Paz, decía que le gustaba “castigar a la mujer para que sepa quién manda”. Los agentes escucharon esta frase en un audio que tenía en uno de sus teléfonos cuando le detuvieron en Zaragoza, en noviembre de 2018.

Las conversaciones de WhatsApp no se pudieron recuperar, pero sí los audios y las fotografías. En Zaragoza, Román había contactado con varias mujeres, a las que les decía: “Me gusta la sumisión y la dominación, castigar a la mujer cuando se porta mal”.

En otro audio grabado antes de la desaparición de Heidi, el 1 de agosto de 2018, exigía a su novia que cogiese “el puto teléfono” porque se estaba “calentando” y añadía: “Llámame que vamos a tener un problema y serio”. También se halló una búsqueda por internet que hizo en Zaragoza, bajo una expresiva frase: “descuartizamiento de Usera”.