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Asturias solo podría capturar al oso de Sonande si hubiese sido “agresivo y peligroso”

El protocolo de intervención deja fuera de la categoría de “problemático” a los ejemplares que son sorprendidos en una carretera

El Principado solo estaría autorizado a capturar un oso si “inequívocamente” se tratase de un ejemplar problemático, o lo que es lo mismo, “agresivo y peligroso”. Así lo recoge el Protocolo de Intervención con Osos en la Cordillera Cantábrica, aprobado por el Gobierno central en enero de 2019 y que sigue Asturias tras el fatal accidente en Cangas del Narcea. Los expertos sostienen que el animal que golpeó este domingo en la cara a una vecina no puede considerarse un plantígrado problemático y, por tanto, su captura sería desproporcionada.

El protocolo diferencia entre tres tipos de osos. Además de los problemáticos o peligrosos, están los habituados –son ejemplares que “de manera recurrente” bajan a los pueblos en busca de comida– y los osos con problemas –como crías abandonadas, ejemplares heridos, enfermos, con síntomas evidentes de envenenamiento...–. La disuasión de ejemplares habituados, según establece la Administración, se tiene que realizar “mediante gritos, elementos sonoros, perros atraillados, e incluso mediante artefactos pirotécnicos, disparo de balas de goma o munición real de poco gramaje a corta distancia”.

Las capturas, sin embargo, solo están contempladas para osos peligrosos. El protocolo deja fuera de esta categoría a los osos que “exhiban comportamientos agresivos defensivos como sucede con un oso herido, un oso acosado en una cacería o por la presencia humana, un oso sorprendido súbitamente en una vía de escape bloqueada, un oso alimentándose en una carroña o en un lugar de descanso y, particularmente, una hembra acompañada de crías que se encuentra a muy poca distancia”. Ante ejemplares verdaderamente problemáticos o agresivos, el Gobierno permite retirarlos “mediante su captura y traslado a cautividad –utilizando trampas o lazos principalmente– o de su sacrificio ‘in situ’ o en un centro de recuperación y mediante métodos legalmente autorizados e incruentos”.

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