Tras una profunda reforma ejecutada en medio de las dificultades asociadas a la pandemia declarada a principios del pasado 2020, Llagar El Quesu inauguró el pasado mes de enero un nuevo local en Madrid, considerada por muchos la capital gastronómica de Europa.
Situado en el castizo barrio de Chamberí, en un edificio histórico construido en la década de 1870, Llagar El Quesu se configura como un nuevo referente en carnes a la parrilla y cocina asturiana en la capital de España. Con 700 metros cuadrados de instalaciones y capacidad para más de 100 comensales, Llagar El Quesu lleva al corazón de España lo mejor de la tradición culinaria de Asturias.
Más de 90 años avalan el buen hacer de este blemático enclave de la restauración asturiana, parrilla de carnes de referencia y punto de encuentro de miles de clientes satisfechos. Ubicado en Bobes, en las instalaciones de un primitivo llagar de sidra, El Quesu continúa hoy en día una tradición hostelera iniciada a principios de los años 30 del pasado siglo. Con instalaciones renovadas en el 2018 pero conservando toda la esencia de siempre, ofrece una experiencia culinaria única en horario ininterrumpido de lunes a domingo, con carnes preparadas en su gran parrilla a la vista de los comensales junto a la mejor selección de postres caseros y una cuidada bodega.
Carta sin gluten
Otro aspecto destacable y que, sin duda marca un punto diferencial en materia de innovación, tanto en las instalaciones de Asturias como en el nuevo local de Madrid, es el hecho de que todos los productos ofertados en la carta están elaborados sin gluten. Prueba de ello es la reciente certificación de Llagar El Quesu por ACEPA (Asociación Celíaca del Principado de Asturias) como restaurante 100% libre de gluten, con una carta totalmente adaptada a los celíacos en la que es posible disfrutar de los sabores tradicionales de Asturias sin la presencia de gluten.
Otra de los aspectos que ha sabido cuidar es la posibilidad de llevarse la comida a casa (el conocido como servicio “take away”). Todo ello a cualquier hora del día, ya que la parrilla y cocina del Llagar El Quesu permanecen abiertos sin pausas. atendiendo clientes desde la apertura al cierre.
Cuando se pregunta a los actuales gestores por la clave del éxito de Llagar El Quesu, éstos manifiestan convencidos que “el verdadero protagonista siempre ha sido el local, con su oferta culinaria y su estilo inconfundible. No podíamos renunciar ni a la decoración existente ni a la forma de hacer las cosas porque siempre ha funcionado muy bien y siempre ha tenido una clientela fiel que ahora encuentra que todo sigue igual, y, en palabras de muchos, incluso mejor”.
Como ejemplo de lo anterior, no hay más que fijarse en las tradicionales señas de entidad del negocio, que permanecen inalterables con el paso del tiempo: la increíble colección de llaves antiguas o el amplísimo ajuar de herramientas, toneles y útiles de cocina tradicionales que cuelgan del techo y paredes de piedra de este llagar, dignos de cualquier museo etnográfico. Todo ha sido respetado y conservado con el mismo objetivo: conseguir que el cliente habitual no percibiese más cambios que los estrictamente necesarios.
En palabras de todos aquellos que visitan el local, “Llagar El Quesu es siempre un referente seguro en calidad de producto, servicio y precios razonables”, sobradamente conocido por el público asturiano y, desde enero del 2021, también presente en la comunidad de Madrid.
