La Consejería de Educación tiene previsto para el próximo curso una organización “más flexible” en los centros de educación especial, según trasladó ayer la directora general de Ordenación, Paula García, a los equipos directivos. Se mantendrán los grupos de convivencia, pero se “permitirá adecuar la interrelación del alumnado ante una posible mejora de la situación epidemiológica”.
García también avanzó a los responsables de los colegios de educación especial que “por fin”, a partir de septiembre, se podrán desarrollar actividades extraescolares, aunque “ajustadas a las medidas de prevención”. Asimismo, se permitirá el acceso de las familias a los centros para reunirse con el equipo educativo de sus hijos.