“Va a ser una negociación muy compleja”. El presidente del Principado, Adrián Barbón, asume las dificultades de la discusión sobre la reforma de la financiación autonómica y se propone por eso ampliar los márgenes de la alianza de las regiones del Noroeste para hacer más fuerza en defensa de los postulados que propugna Asturias. Una vez incorporada Cantabria, resalta, “intentaremos sumar a otros gobiernos socialistas fuera del Noroeste para defender una posición que los socialistas asturianos creemos que es una cuestión de justicia”.
En el acto de recuerdo a las ocho personas asesinadas en 1938 en la mina de La Bornaína, en San Martín del Rey Aurelio, Barbón reafirmó ayer lo defendido el viernes en la Conferencia de Presidentes, donde sus planteamientos coincidieron al menos, más allá de la Cornisa, con los de Aragón y Extremadura. Se trata, dijo una vez más, de defender que en el nuevo modelo de reparto pese “el coste real” de prestar servicios a poblaciones como la asturiana, de hacer ver “que el sistema de financiación no puede construirse sobre la base que proponen algunas comunidades, por población sin más, porque no cuesta lo mismo dar asistencia sanitaria en una autonomía como la nuestra que en otras”.
El Presidente aprovechó además para cargar contra “los partidos que prefieren el método digital de elección, en los que alguien desde Madrid decide quién es el líder territorial. Les digo que no tengan miedo a la democracia”.
