En el tercer curso en pandemia habrá muchas menos cuarentenas. Asturias se sumó ayer a otras comunidades –como Madrid, Cataluña, Castilla y León, Valencia, País Vasco o Baleares–, al decidir que los alumnos que tengan administrada la pauta completa de vacunación o hayan pasado el covid en los últimos seis meses (180 días) no tendrán que confinarse si son contactos estrechos de un infectado. Según los últimos datos que aportó la semana pasada la Consejería de Salud, el 42% de los estudiantes mayores de 12 años ya están inmunizados y el 86% tiene una inyección puesta. En consecuencia, el número de cuarentenas y de aulas cerradas será este curso muy inferior al del pasado, cuando también la pandemia estaba más desbocada, y la formación presencial ganará peso frente a la online. El Principado, por contra, no autoriza, por ahora, que los grupos burbuja puedan mezclarse en los patios.
El director general de Ordenación, Evaluación y Equidad Educativa, David Artime, explicó ayer, tras mantener una reunión específica sobre covid con las direcciones de los centros de educación especial, que el cambio en las cuarentenas “no está aún aprobado definitivamente por la Comisión Nacional de Salud Pública”, que lo hará previsiblemente hoy, pero que “está revisado y tiene el visto bueno de las ponencias y grupos de trabajo”. Por lo que, añadió, “damos por bueno el contenido”. Este cambio no supone otra cosa más que aplicar en el ámbito educativo lo que ya funciona en atención primaria.
La no cuarentena afecta, obviamente, tanto a alumnos como a profesores y demás personal no docente. En este sentido, los escolares de Infantil y Primaria –tienen menos de 12 años y, por tanto, no están vacunados– estarán exentos de guardar cuarentenas si pasaron el coronavirus en los últimos 180 días. El curso pasado, cuando todos los contactos estrechos debían confinarse en casa durante 10 días, se confinaron 1.366 aulas. La mayoría en el primer y segundo trimestre, con 638 y 519 respectivamente. La recta final del curso fue más suave, con 209 unidades cerradas. Aun así, en el peor momento de la pandemia, el número de aulas confinadas no rebasó el 1,5% de las 7.887 en funcionamiento.
En la primera de las reuniones que los equipos de las consejerías de Educación y Salud mantendrán antes de que empiece el curso –este jueves vuelven al cole Infantil y Primaria– con las direcciones de los centros estuvo ayer presente el director general de Salud Pública, Rafael Cofiño. Frente a la novedad de las cuarentenas, el Principado no incluirá en su actualización del protocolo covid la eliminación de los patios sectorizados. Es decir que, de momento, los grupos burbuja no podrán mezclarse ni al aire libre (en los recreos), como esperaba buena parte del profesorado. Esa flexibilización, que ayer pusieron encima de la mesa los directores de educación especial, tendrá que esperar.
“Nuestros alumnos necesitan esa interacción, ya que son críos que tienen una socialización exterior menor que los niños de centros ordinarios. Y a nivel emocional sería muy positivo para ellos”, señaló Rubén Velasco, director del colegio San Cristóbal de Avilés. Los centros de educación especial también pidieron al Principado poder recuperar este curso la limpieza de boca de los estudiantes, quedando este aspecto aún en “duda”. “Es necesario retomarlo; los niños llevan año y medio con deficiencias en este sentido”, precisó Velasco, quien aseguró que los docentes afrontan el curso con “ilusión”.
“El año pasado teníamos nervios por el virus, este los tenemos por ver a los alumnos”, señaló. También hay “más tranquilidad”, comentó Marta Rodríguez de la Flor, directora del colegio de Latores de Oviedo, debido a la vacunación. “Viendo que el curso pasado pudimos, este año saldrá aún mejor”, dijo. No obstante, hay medidas que llegaron con el covid y que se quedarán, a juicio de Rubén Velasco, porque “beneficiaron” al alumnado. “Antes teníamos un recreo con 90 niños, ahora tenemos tres con 30 alumnos; eso reduce los conflictos”, concluyó.
Los últimos detalles de la vuelta al cole
Gestión de casos. Asturias seguirá la estela de otras comunidades y no obligará a guardar cuarentenas a los alumnos que tengan administrada la pauta completa de vacunación o hayan pasado el covid en los últimos 180 días si son contactos estrechos de un infectado. La medida se espera que sea aprobada hoy a nivel nacional por la Comisión de Salud Pública.
Grupos estanco. Los grupos burbuja de Infantil y Primaria no podrán finalmente interaccionar en los patios, como deseaba gran parte del profesorado. De esta forma, los recreos seguirán siendo sectorizados para que alumnos de distintas aulas no puedan mezclarse. Esta medida, no obstante, se podrá flexibilizar más adelante en función de la evolución de la pandemia.
Coordinación covid. El Principado también mantendrá la misma estructura de coordinación que funcionó el año pasado para gestionar la crisis sanitaria. Es decir, los responsables covid de los centros educativos en coordinación con el personal de enfermería del área sanitaria responsable para cada colegio y con el equipo de Salud Pública de vigilancia para cada caso.
