La Sindicatura de Cuentas tiene “dudas significativas” sobre la capacidad de la Sociedad de Gestión y Promoción del Suelo (Sogepsa) para seguir siendo una empresa en funcionamiento –esto es, que puede seguir en marcha al menos otro ejercicio– tras detectar la existencia de “incertidumbre material”. Su estructura financiera a finales de 2019 se caracterizaba por un “elevado nivel de endeudamiento a largo plazo y su pasivo se situó en los 148 millones”, según el informe de la Sindicatura, que cifra sus principales activos en menos de 102,5 millones. Esta fiscalización pretendía comprobar la adecuación a la legalidad de las contrataciones de la sociedad, mostrar su situación económico-financiera y su viabilidad.
El trabajo de la Sindicatura ha permitido detectar tensiones de liquidez agravadas por la crisis del sector inmobiliario y la baja demanda de suelo, la existencia de pérdidas estructurales por su elevado nivel de deuda y un sistema de financiación inviable. Para la Sindicatura, sería recomendable que los órganos de gestión de Sogepsa aprobasen un plan estratégico que tenga en cuenta su actual situación jurídica. La Sindicatura detectó en 2019 que Sogepsa había adjudicado de forma directa contratos que no salieron a licitación, lo que valió una condena por prevaricación al exdirector.
