La señalización viaria de los puertos asturianos es deficiente; faltan medios para realizar los cierres de carreteras por la nieve; el Plan de Vialidad Invernal del Principado carece de un análisis específico de riesgo de aludes para la AS-112 y el puerto de San Isidro; y, fuera de los Picos de Europa, en ninguna carretera autonómica asturiana existen dispositivos de control nivológicos que permitan predecir o determinar el riesgo de aludes en tiempo real, ni protocolos que establezcan las medidas de prevención e intervención en ese caso. Son algunas de las carencias apuntadas ayer por la Corriente Sindical d’Izquierda (CSI), que se ha personado como acusación pública en el caso relativo al accidente laboral ocurrido en el puerto de San Isidro el 1 de enero pasado, en el que murieron sepultados por un alud de nieve dos trabajadores del Servicio de Conservación de Carreteras, César Fernández y Virgilio García.
“Pasaron más de nueve meses desde el accidente laboral y no nos consta ninguna actuación encaminada a prevenir y evitar que se puedan repetir las mismas situaciones de riesgo que provocaron la tragedia, más allá de unas pocas señales y la compra de unos localizadores. Es totalmente insuficiente”, señaló el sindicato, que se ha marcado como objetivo determinar “las causas del grave accidente laboral y que se establezcan las responsabilidades a las que hubiese lugar”.
El sindicato sostiene que las causas del accidente del pasado mes de enero parecen “indiscutibles: ausencia de medios técnicos que permitan determinar con certeza los riesgos inmediatos, la ausencia de protocolos que ordenen intervenciones adecuadas, la falta de medios activos y pasivos que hagan las carreteras asturianas más seguras, la ausencia de evaluación de riesgos y formación específica que permitan a los trabajadores públicos actuar con total seguridad para sí mismos y para los usuarios de las vías”. Y, además, “la situación de total deterioro y progresivo desmantelamiento del Servicio de Conservación y sus consecuencias para la seguridad vial”.
Según CSI, la deficiente señalización y la falta de medios para cerrar carreteras provoca en ocasiones que “en situaciones de riesgo de nevadas y aludes los ciudadanos sigan circulando por las vías cerradas al tráfico y que sea necesario desplazar vehículos quitanieves para proceder a su rescate”.
