Hacienda publicó ayer los mapas que ayudarán a determinar los valores de referencia de los inmuebles en 2022. El cambio afecta a la base imponible sobre la que se calculan impuestos como el de Sucesiones, Transmisiones y Patrimonio y abre la puerta a una nueva subida fiscal.

El nuevo valor de referencia de los inmuebles es determinado por la Dirección General del Catastro como resultado del análisis de los precios de todas las compraventas inmobiliarias que se realizan ante fedatario. Por lo tanto, en teoría el valor de referencia estará más cerca del valor del mercado que del catastral, por lo que es previsible un aumento de las bases imponibles de los tributos. Por ello, el Ministerio de Hacienda ha aprobado unos factores de minoración para evitar que el valor de referencia supere el valor de mercado. Esos factores de minoración son del 0,9 para inmuebles rústicos y urbanos, y según expertos son “insuficientes” para impedir una subida de impuestos.