Las facultades de Periodismo tendrán que incorporar dos nuevas asignaturas: educación física y gestión del catalejo. Hay que tener buenas piernas para correr. Correr mucho, casi como Forrest Gump, con el objetivo no de llegar a la noticia, sino de alejarse de ella. No vaya a ser que, fieles a sus malas costumbres, los periodistas se enteren de algo y se lo cuenten a la gente.
La apoteosis del alejamiento de la noticia tuvo como escenario Somiedo, con motivo de la entrega, el sábado, del premio “Pueblo ejemplar” a Santa María del Puerto. Ante una Familia Real que preconiza la cercanía, la comitiva de informadores fue confinada y obligada a seguir el recorrido a una distancia glacial. A mitad de trayecto, fueron exhortados a galopar por una caleya empedrada con el grandioso objetivo de llegar a un prado situado a unos 200 metros de un mirador al que los Reyes y sus hijas tardaron unos veinte minutos más en arribar. Acto seguido, los periodistas sacaron los prismáticos y catalejos, y procedieron a imaginar.