No han salido muy bien parados los conductores profesionales asturianos de la última campaña de control de tráfico sobre autobuses y camiones desarrollada por la DGT. Durante una semana, entre el 11 y el 17 de octubre, guardias civiles de la Agrupación de Tráfico de Asturias controlaron en ese tiempo 255 vehículos de los que 91 conductores de camión fueron sancionados y también 3 profesionales al volante de autobuses. Y se tuvieron que inmovilizar 3 camiones por infracciones que eran causa obligada de no circulación.

Eso supone que casi uno de cada tres vehículos controlados acabó con alguna sanción. Las infracciones más habituales fueron las del exceso de tiempo de conducción. De los 94 sancionados, el 72% -o sea, 68 personas- conducía con exceso de horas, y un 15% de camioneros tenía alguna irregularidad en el tacógrafo.

Las infracciones relativas a la documentación, del vehículo o del conductor, la campaña supusieron que 14 conductores de camiones circulaban con irregularidades administrativas.

Además, 8 conductores fueron denunciados por exceso de peso o mala disposición de la carga y 3 por infracciones relativas a cinturones de seguridad y otros dispositivos (2 usuarios de camiones y 1 de autobús).

Respecto a circular con alcohol u otras sustancias psicotrópicas, 1 conductor de autocar dio positivo a drogas.

La campaña ha resultado una de las peores de las últimas llevadas a cabo en Asturias, con un 36,8% de sancionados respecto al total de vehículos controlados. En febrero pasado ese porcentaje fue del 21%; un año antes había sido del 43% y en 2019 había sido del 22%.