La Facultad Padre Ossó y el Colegio Oficial de Terapeutas Ocupacionales del Principado de Asturias celebraron ayer el Día Mundial de la Terapia Ocupacional con una jornada de visibilización de la profesión en Oviedo. El objetivo de las actividades desarrolladas en la plaza de la Escandalera y la calle Palacio Valdés –hubo desde un taller de accesibilidad hasta un aula de estimulación multisensorial– era dar a conocer a la labor de los terapeutas ocupacionales, aún muy desconocida. Según defienden los promotores de la iniciativa “aquellos profesionales que están capacitados, a través de un grado universitario, para trabajar con personas con algún tipo de dependencia y/o discapacidad, ayudándoles a alcanzar el mayor grado de autonomía posible”.